El 25 de marzo de 2015 la caída fuera de todo pronóstico de 67 milímetros de agua provocaron el rebalse en las piscinas aluvionales ubicadas en la quebrada Taltal. Este fenómeno generó una importante caída de barro, arrasando con todo a su paso.
A diferencia de lo sucedido en otras ciudades del país con similares características, y lo sucedido en el pasado en el propio Tal Tal, aquella vez fue distinto, durante el tiempo que duró la emergencia y posterior a ella, no se reportaron personas desaparecidas ni tampoco fallecidos, sólo daños materiales.
Esta diferencia crucial se debió a varios factores: la educación para actuar frente a desastres socio-naturales, la acción preventiva detrás de la construcción de las piscinas aluvionales y la preparación de la comunidad local para enfrentar las situaciones.
Actividades
Con el objetivo de mantener esta memoria, y en el contexto de una crisis climática, que supone la intensificación de estas amenazas, la comunidad taltalina participó en una ruta de memoria, por los principales hitos del alud de 2015.
En la actividad, las y los vecinos, Bomberos, personal del hospital, carabineros y estudiantes narraban a medio centenar de personas los principales acontecimientos de aquel día. Un momento emotivo se vivió cuando German Barraza, periodista de Radio Definición, revivió como mantuvo informada la ciudad a través del único medio de comunicación local que logró mantenerse en funciones.
Ciudades con buena Memoria
Previo a la ruta, el alcalde Guillermo Hidalgo, a nombre de la ciudad, firmó el pacto “Ciudades con buena Memoria”, en un acto público en la plaza de armas de la ciudad. La autoridad enfatizó que se trata de “un compromiso de mantener la memoria para evitar que estas tragedias puedan tener mayor gravedad”.
Mauricio Soriano, Coordinador Nacional del Proyecto AdaptaClima de PNUD, señaló que “la actividad de conmemoración desarrollada es de gran importancia para rescatar la memoria de eventos pasados y así ir generando conciencia y educación a las nuevas generaciones, desarrollando una comunidad resiliente a los efectos del clima”. Por su parte, desde Fundación Proyecta Memoria, Calima Wirshing destacó como “la poderosa historia de Tal Tal, que se remonta a asentamientos pre colombinos, con un desarrollo minero e industrial, también tiene una historia importante de resistencia y reconstrucción de su comunidad ante desastres socio-naturales, un registro cuya memoria ha permitido afrontar estos desafíos”. “La memoria tiene sentido hacia el futuro cuando actuamos en el presente y ese desafío pretendemos compartir con estas actividades con la comunidad Taltalina”, agregó.