Aunque el realizador chileno Rodrigo Sepúlveda no pudo viajar a Venecia por la pandemia, su filme “Tengo miedo torero” capturó la Mostra este viernes con la increíble historia del viejo travesti involucrado en el atentado en 1986 contra el dictador Augusto Pinochet.
La cinta, basada en la novela del escritor, cronista y artista plástico chileno Pedro Lemebel, compite con otros 9 filmes en la sección paralela e independiente “Le Giornate degli Autori” (Las Jornadas de los Autores), entre las más innovadoras del festival veneciano, que programó el jueves en la noche su primer pase a la prensa.
En una sala casi vacía debido a las estrictas medidas de seguridad adoptadas por la pandemia, que impusieron la reducción del público, la obligación del uso continuado de la mascarilla y la posibilidad de ser rastreado a través del dispositivo para reservar el puesto, la película fue estrenada a nivel mundial.
Un estreno particular, muy simbólico, porque los organizadores de las Jornadas están empeñados en contribuir con la edición del 2020 a la reactivación del cine mundial tras la crisis suscitada por meses de confinamiento.
El nuevo reto de Alfredo Castro
El versátil actor chileno Alfredo Castro, en el papel de la “Loca del Frente”, vuelve a medirse con una interpretación compleja, la del viejo y pobre trasvesti, después de haber arrancado elogios en 2005 con el filme venezolano “Desde allá” de Lorenzo Vigas, vencedor del León de Oro.
“La única certeza que tenía era que ‘La Loca del Frente’ tenía que ser él, Alfredo Castro, por edad, madurez, trayectoria y porque Lemebel se juntó con él y le ordenó ser ‘La Loca"”, contó el realizador en una charla con una emisora de su país.
Entre el melodrama y el thriller político, la cinta cuenta con una música tocante que recorre esos años marcados por el miedo pero también por las protestas y las marchas contra la dictadura militar, acompañadas por el repetido “Se va caer, se va caer”.
La extraña e inusual historia de amor entre la “Loca del Frente”, un travesti que borda manteles para las esposas de los militares y Carlos (el actor mexicano Leonardo Ortizgris), un guerrillero del Frente Patriótico Manuel Rodríguez, retrata el sentimiento de un país, dispuesto a todo para asesinar al dictador.
La banda sonora, a cargo del músico Pedro Aznar, cantante, instrumentista y compositor argentino, resulta otro personaje del filme, al acompañar y sumergir al espectador en los ritmos, los boleros y las canciones famosas de los años 40 y 50.
Y es justamente la canción de Lola Flores, “Tengo miedo torero”, la que inspira esa historia, así como otros temas y arreglos musicales citados en la novela de Lemebel.
La arriesgada operación clandestina para asesinar al dictador, que en la realidad ocurrió en la cuesta “Las Achupallas”, a 40 kilómetros de Santiago, dejó 5 muertos y varios heridos y no logró su objetivo, el de matar a Pinochet.
Sin embargo, la transformación de “La Loca del Frente”, que nunca se había metido en política, después de las náuseas que le produce imaginar su mantel bordado en la mesa de los militares, la llevan a tomar conciencia y a sentirse finalmente una persona digna.