La batalla legal del director franco-polaco Roman Polanski contra su expulsión de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas fue desestimada por un juez de Los Ángeles este martes.
Mary Strobel, jueza de la corte superior de Los Ángeles, consideró que la junta de la academia “tenía motivos para expulsar” a Polanski y que su decisión “está respaldada por la evidencia” y “no fue arbitraria ni caprichosa”.
El director de clásicos como “Chinatown” y “El bebé de Rosemary” huyó de Estados Unidos en 1978 después de admitir haber violado a una niña de 13 años.
La academia, con sede en Los Ángeles y que otorga los premios Oscar, expulsó a Polanksi cuatro décadas después en medio de la efervescencia del movimiento #MeToo. El director presentó una petición legal para obligar a la organización a revertir su decisión.
Según la jueza Strobel, Polanski “tuvo la oportunidad de presentar cualquier evidencia” sobre si “debería o no seguir siendo miembro de la Academia ‘a la luz de su condena penal y su condición de fugitivo”.
El director admitió la violación de la menor Samantha Geimer en un acuerdo de culpabilidad en 1977 para evitar un juicio por cargos más graves.
Pero huyó a Francia al año siguiente después de cumplir 42 días en la cárcel cuando parecía que un juez estaba reconsiderando su liberación.
Polanski, que tiene 87 años, fue galardonado en 2003 con el Oscar al mejor director de la Academia por “El Pianista”.