Sara Bertrand entrega una novela donde se van entrelazando las vivencias de dos tiempos de Lily, la protagonista, con fuerte acento en las relaciones afectivas, marcadas por las frustraciones productos de los abandonos y una sensibilidad profunda para captar los ambientes, los detalles, las miradas, los silencios, las vibraciones.

“…buscando, siempre buscando, algo que está allá, porque nada es suficiente, no es fácil rellenar la ausencia” (pp 183), pareciera ser una buena síntesis de un libro que nos lleva por los recovecos de la vida interior de la protagonista siendo niña y joven. Una historia que tiene referencias -o similitudes- familiares que se pueden remontar a Julio Bertrand Vidal (1888-1918) y su descendencia, con algunos arquitectos incluidos.

“No éramos religiosos, pero en ese tiempo aprendimos a mirar al cielo, a suplicar.” (pp 90)

Lily pareciera debatirse entre un Arca de Noé y un naufragio, donde -con sus dos hermanos- trata de sobrevivir apenas apoyados por su padre y abuelos.

“La muerte no se gana fácilmente, el dolor debe sentirse.” (pp 97)

“Afuera” indaga en lo íntimo, en lo profundo de ciertos sentimientos, pero -casi siempre- al borde del abismo.

Sin embargo, y tal vez lo más perturbador, es que estos dos tiempos pasados -infancia y adolescencia- se relatan en forma vívida desde un hoy, como si esas vivencias con sus golpes y heridas estuvieran ahí, recién hechos.

“Cuídate, Lili, la vida te va a pegar.” (pp 172)

Con una fragilidad que produce sentimientos encontrados, diversos.

“– No se separaron más, con Eugenio estábamos tan contentos, hasta que vino lo que vino.
– ¿Yo?
– No, mijita, usted fue la alegría más grande que nos dio la vida.” (pp 182)

“Afuera”, su título, pareciera hacer alusión a varios sentidos: el afuera de la calle, la ciudad (acorde a la portada), a lo externo al hogar, a la familia, como a lo que está afuera de nuestro interior, de nuestras percepciones, vivencias, sentimientos.

“…hacer como si su historia no existiera. Porque quema. Duele todavía.” (pp 179)

“Afuera” es un gran libro, femenino sin dudas (al menos en estos tiempos), que puede provocar y remover. Y en algunos pasajes, de gran belleza.

“En sus ojos encontró otra forma de narrarse y eso le gustó.” (pp 93)

Afuera

Sara Bertrand
Emecé, Cruz del Sur
Editorial Planeta S.A.
Santiago de Chile, mayo de 2019