Este 28 de septiembre se conmemora el natalicio de Víctor Jara (1932-1973), quien fuera víctima de uno de los asesinatos más brutales, injustificables y que mayores repercuciones tuvo y sigue teniendo de los miles que hubo a partir del Golpe de Estado.
Después de muchos años, finalmente la justicia chilena condenó del homicidio a Hugo Sánchez Marmonti, Raúl Jofré González, Edwin Dimter Bianchi (sindicado cono el “Príncipe” del Estadio Chile), Nelson Haase Mazzei, Luis Bethke Wulf, Juan Jara Quintana, Hernán Chacón Soto y Patricio Vásquez Donoso. Pedro Barrientos Núñez, quien reside en Estados Unidos desde el regreso de la democracia al país,es señalado por algunos como el principal responsable.
La vida y el asesinato del cantautor, profesor, actor y director de teatro, se pueden resumir en tres documentales: El derecho de vivir en paz (1999), de Carmen Luz Parot, que hace un detallado recorrido sobre la vida de Víctor Jara; Masacre en el Estadio (2019) de B.J. Perlmutt y a Jeff y Michael Zimbalist (disponible en Netflix), que indaga sobre los responsables del asesinato y, en especial, en Pedro Barrientos; y Víctor Jara N°2547 (2013) de Elvira Díaz, aborda cómo el cuerpo del artista pudo ser rescatado evitando así ser un detenido desaparecido más.
El derecho de vivir en paz (1999), de Carmen Luz Parot
En 101 minutos, Carmen Luz Parot hace un recorrido de la vida de Jara desde su infancia hasta su asesinato en el Estadio Chile, actual Estadio Víctor Jara. Recurriendo a gran cantidad de entrevistas y material de archivo, en documental tiene un relato lineal, didáctico. Dado el año de realización, nada se habla de la forma y de los involucrados en el crimen.
“El derecho de vivir en paz” es un documental necesario, una base de conocimiento -con un gran aporte de las imágenes de archivo y testimonios– aunque no presente miradas críticas o sobre los conflictos internos de Víctor Jara.
Masacre en el Estadio (2019) de B.J. Perlmutt y a Jeff y Michael Zimbalist
El gran valor de este documental es que confronta a Pedro Barrientos Núñez, sindicado como el principal responsable del asesinato. Por un lado, el documental aporta testimonios, incluido el de una persona que luego se desdice, y recorre el Estadio Chile (Estadio Víctor Jara) mientras por el otro confronta al ex-militar en Estados Unidos (donde reside desde la vuelta de la democracia al país). Por un lado juntan pruebas, por el otro Barrientos niega y vuelve a negar. Finalmente Barrientos se somete al “detector de mentiras”…
Masacre en el Estadio es un aporte en tratar de dilucidar el asesinato de Víctor Jara y mostrar “mundos” que aún no dialogan, pactos de silencio, verdades incompletas. Su mayor debilidad es que, al parecer, los tiempos de Netflix no permitieron mayor maduración.
Víctor Jara N° 2547
Este documental (cuyo título hace referencia al número de la autopsia) aborda la historia de lo que pasó con el cuerpo del cantautor. Elvira Díaz centra su película en las figuras de Héctor Valentín Herrera Olguín, joven funcionario del Registro Civil que es obligado a trabajar en el Servicio Médico Legal después del Golpe, y Joan Jara, la viuda.
“Víctor Jara N° 2547” muestra lo que fueron las duras vivencias de estos dos protagonistas los días posteriores al Golpe. Vale destacar que gracias a la gran valentía de Herrera, que a riesgo personal corrobora que el cadáver corresponde a Jara, averigua la dirección de su residencia para luego avisarle a Joan Jara dónde estaba el cuerpo de su marido, éste no se “perdió” (enterrado en una fosa común, en el Patio 29 o engrosando la lista de detenidos desaparecidos).
Estos tres documentales, más allá de posturas políticas o de apreciaciones sobre su obra, muestran una figura relevante e influyente en la cultura chilena y latinoamericana y un hecho brutal (cuarenta y cuatro balas) que empaña nuestra historia.
“El derecho de vivir en paz” y “Víctor Jara N° 2547” se pueden ver en el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos.