El acto de desagravio en el Museo de la Memoria, tras el nombramiento y salida de Mauricio Rojas del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio estuvo marcado por la multitudinaria asistencia.

La explanada del Museo de la Memoria se vio repleta, pero no sólo eso. Las calles y hasta un sitio eriazo a un costado del recinto albergaron a las miles de personas que respondieron al llamado en rechazo al negacionisimo.

Francisco Estévez, director del Museo de la Memoria, se subió al escenario, donde sostuvo que “la gente quiere saber que las víctimas de la represión de la dictadura, su recuerdo y su memoria, van a ser custodiadas”.