El presidente venezolano, Nicolás Maduro, desafió este jueves a Mariano Rajoy a realizar un “debate presidencial” español en Caracas, como queja por lo que considera una “campaña mundial contra Venezuela” y que es auspiciada desde Madrid.
“El 26 de junio que viene en España hay elecciones. Como ellos están tan interesados en mal hablar, en manipular y mentir sobre Venezuela, yo le digo a Rajoy que lo espero en Caracas para que vengan los candidatos presidenciales y hagan su debate presidencial en Caracas, ya que están tan interesados en Caracas”, dijo Maduro desde el palacio de Miraflores, ante una concentración de estudiantes universitarios oficialistas.
El mandatario venezolano calificó de “ridícula” la cobertura de la crisis del país caribeño que se hace desde los medios de comunicación españoles, de los que dijo que “todos hablan más de Venezuela que de España“.
En tono burlesco, Maduro afirmó que “si ustedes quieren debatir vengan para acá, Rajoy cobarde. Ven para Venezuela y hacemos el debate presidencial y participo yo”.
Según el presidente venezolano “de repente me lanzo y gano las elecciones en España. ¡En España hace falta un Maduro!” aseveró.
Sin mencionarlo, también se refirió al jefe del partido Ciudadanos de España, Albert Rivera, quien estuvo en Caracas esta semana en apoyo a la oposición venezolana, incluyendo al encarcelado Leopoldo López.
“A mi me conocen más en España que a estos candidatos. A un ridículo que vino por ahí, no sabemos ni el nombre. Que se lanza a caminar por las calles de España y ni lo conocen”, dijo Maduro.
Rivera defendió este martes el derecho de la oposición a convocar un referendo revocatorio contra Nicolás Maduro.
“Es un derecho. Yo apoyo que ustedes puedan defender su Constitución y celebrar este referendo revocatorio como vía de escape, como salida”, señaló.
También abogó por la liberación de opositores venezolanos presos.
Apuntó que “no puede haber presos políticos”, y resaltó que la liberación de los disidentes debe ser un paso previo para un eventual diálogo entre el gobierno del presidente socialista Nicolás Maduro y la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD).
El número dos del chavismo, el diputado Diosdado Cabello, planteó el pasado miércoles la posibilidad de que las autoridades migratorias impidieran el ingreso de Rivera, señalando que su objetivo era “conspirar” contra el gobierno socialista.
Pero el presidente del Parlamento, el opositor Henry Ramos Allup, defendió este martes la visita afirmando que “la ayuda no es injerencismo”.