Autoridades del departamento de Norte de Santander, al noreste de Colombia, informaron este jueves sobre el presunto secuestro de una mujer desaparecida la víspera, y ofrecieron cerca de 34.500 dólares por información sobre su paradero (cerca de 21,7 millones de pesos chilenos).
“Con relación al secuestro de la señorita Melissa Trillos Gómez en la ciudad de Ocaña (…) se ha definido una recompensa de hasta 100 millones de pesos (colombianos) ofrecida por la Gobernación del departamento Norte de Santander”, dijo en un comunicado la Policía Nacional de Colombia.
Trillos Gómez es una abogada de 25 años, hija de un comerciante, según detallaron medios locales.
El tema fue analizado este jueves en un consejo de seguridad extraordinario presidido por la alcaldesa de Ocaña, Miriam Prado, y autoridades policiales y militares, así como funcionarios de la Fiscalía y la estatal Defensoría del Pueblo.
“Se trabaja también para establecer la autoría de los hechos, teniendo en cuenta que en la zona delinquen varios grupos armados organizados del sistema de amenaza terrorista total”, añadió el texto.
Guerrillas y bandas organizadas
En la selvática región del Catatumbo fronteriza con Venezuela, donde Trillos habría sido raptada, operan bandas criminales nacidas de remanantes de los grupos paramilitares surgidos para enfrentar a las guerrillas que actúan en Colombia desde los años 1960, y desmovilizados a instancias del gobierno hace una década.
La zona también es la cuna del Ejército de Liberación Nacional (ELN, guevarista), segunda guerrilla del país con unos 1.500 combatientes según cifras oficiales.
El gobierno del presidente Juan Manuel Santos y el ELN, fundado en 1964, instalaron una mesa pública de conversaciones de paz a finales de marzo en Caracas después de dos años de diálogos exploratorios.
Uno de los puntos más sensibles para el inicio de las negociaciones es el del secuestro. “No es aceptable avanzar en una conversación de paz con el ELN mientras mantenga personas secuestradas”, dijo Frank Pearl, jefe negociador del gobierno con esa guerrilla.
El secuestro ha sido una importante fuente de financiación para los grupos armados ilegales que actuaron en Colombia en las últimas cinco décadas. Según el Centro de Memoria Histórica, hubo más de 27.000 entre 1970 y 2010.
El conflicto colombiano, que comenzó como una sublevación campesina en la década de 1960, ha enfrentado durante más de 50 años a guerrillas de izquierda, paramilitares de derecha y miembros de la fuerza pública y deja 260.000 muertos, 45.000 desaparecidos y 6,8 millones de desplazados.