Preocupación ha generado la muerte de una niña de 11 años al interior de un centro del Sename ubicado en la comuna de Estación Central, en la región Metropolitana.
Se trata de una menor que se encontraba internada en el Centro Galvarino como medida de protección y que además estaba en tratamiento de rehabilitación por un caso de abuso sexual.
Lee también: Investigan muerte de niña de 11 años en centro del Sename en Estación Central
Durante horas de ayer lunes, la niña comenzó a sufrir una crisis emocional, que terminó con la pequeña haciendo un paro cardiorespiratorio, siendo asistida tanto por funcionarios del Sename, como por personal médico de una ambulancia y bomberos que llegaron a atender la emergencia, esfuerzos que resultaron infructuosos.
Tras constatarse su muerte, comenzaron de inmediato las pericias para determinar la causa de su fallecimiento. En ese contexto, surgió de inmediato la hipótesis respecto a si algún medicamento recetado producto de su tratamiento o la falta de atención médica oportuna, pudo haber provocado su deceso.
Ante la gravedad de lo sucedido, desde el Servicio Nacional de Menores salieron a descartar algún tipo de negligencia, mientras que aún se mantienen a la espera del informe forense del Servicio Médico Legal para confirmar la causa de muerte.
Al respecto, la directora del Sename Marcela Labraña descartó algún incumplimiento de los protocolos médicos, asegurando que se contaba con los profesionales idóneos para prestar ayuda a la menor, agregando que esta crisis se había desatado debido a que el lunes estaba programada una visita de familiares, los que finalmente no llegaron.
Asimismo, Labraña reiteró que el centro cuenta con los equipos necesarios para asistir a la menor, pero que aún así se cumplió con el protocolo que consiste en llamar a personal médico y a bomberos.
No obstante, los dirigentes de los trabajadores del Sename acusaron a la entidad gubernamental de no contar con los recursos necesarios para tener personal suficiente e idóneo, para cubrir las altas demandas de los centros de detención de menores.
En el caso del Centro Galvarino, se ha señalado que actualmente hay alrededor de 103 personas, pese a que la capacidad máxima es de 70, lo que evidenciaría el hacinamiento al interior del recinto.
Asimismo, acusaron a la directora Labraña de estar faltando a la verdad respecto de datos esenciales, tanto en la cantidad de personal, como también en los equipos idóneos para atender a los niños.
Por el momento, desde el Sename -a través de la directora Marcela Labraña- se ha descartado alguna investigación interna señalando que todos los antecedentes fueron derivados a la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones y al Servicio Médico Legal, los que a su vez deberán informar al Ministerio Público si hubo alguna responsabilidad externa en torno a la muerte de esta niña.
Los padres, en tanto, llegaron hasta el SML para retirar el cuerpo de su pequeña hija, no descartando presentar acciones legales si se determina algún grado de responsabilidad de quienes le administraban el tratamiento médico.