Los felinos suelen ser los regalones del hogar, comiendo a deshoras y durmiendo largas siestas. Si tu gato ya está con sobrepeso o con obesidad es importante tomar medidas.

Dormir y comer son muchas veces las únicas dos actividades de los gatos en un día. Estas mascotas suelen pasearse por la casa en busca de comida y de un lugar para descansar. Sin embargo, el sedentarismo extremo en algunos de estos felinos puede convertirse en un problema serio, traduciéndose en un importante sobrepeso u obesidad, con los riesgos que esto conlleva.

Para saber si tu gato está obeso debes revisar las escalas corporales entregadas por la Sociedad Americana para la Prevención de la Crueldad hacia los Animales (ASPCA) y/o realizar un test para detectar las probabilidades de que tu mascota padezca un trastorno alimenticio.

Pamela B (CC) Flickr

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“El sobrepeso se produce cuando el gato pesa un 10% más de lo normal para su edad y sexo. En tanto, la obesidad corresponde a un exceso del 20% más de su peso ideal. Una forma de evaluar que está en una condición adecuada es observar costillas y columna vertebral no visibles pero fácilmente palpables, cintura abdominal evidente y poca grasa abdominal”, describe Sylvia Arrau, docente de la carrera de Medicina Veterinaria de la Universidad del Pacífico.

¿Por qué un gato llega a tener sobrepeso? “Es frecuente que los gatos esterilizados, machos y hembras, aumenten de peso. Esto probablemente se deba a los cambios que la esterilización produce en su organismo, que acrecienta la tendencia a comer más y a hacer menos ejercicio. La actividad física es un elemento importante a la hora del control de peso, por lo tanto, un gato sedentario tiende a la obesidad o al sobrepeso. El aburrimiento, la ansiedad y el estrés también producen alteraciones en la nutrición del gato”, explica la Dra. en Ciencias Farmacéuticas.

Los hábitos y comportamientos del amo del gato también influyen enormemente en la probabilidad de que el felino pueda caer en un exceso de alimentación.

“El dueño suele ser el principal culpable de este asunto, ya que hay algunas personas que son muy amantes de sus gatos y que pueden tratar de manifestar este amor a través del exceso de alimento. Un error recurrente es que el dueño piense que cuando el gato se acerca y se frota en sus piernas, significa que está pidiendo comida. El amo cede y le da más alimento, lo que es captado por el animal que puede aprovecharse de esa situación ingiriendo más calorías de las que necesita”, asegura la médico veterinaria.

Según un estudio de la marca internacional Purina, el principal problema es que los dueños comparten su comida con las mascotas, por lo que la obesidad de los animales tiene directa relación con el desorden alimenticio de los humanos, de sus amos.

De hecho, en Reino Unido, uno de los países con mayor índice de obesidad en el mundo, uno de cada cuatro gatos padece sobrepeso. Por ello, en la nación europea se creó el primer centro de obesidad de mascotas llamado Pet Fit Club, donde ayudan a diferentes animales de compañía a bajar de peso con dietas y ejercicios.

Si compruebas que tu gato tiene sobrepeso, es importante que lo ayudes a alcanzar su peso ideal, sacándolo de su sedentarismo.

Una forma de controlar y de prevenir el sobrepeso en los gatos es incentivar el juego y enriquecer su ambiente con actividades que le agradan, como por ejemplo instalando escaleras donde puedan trepar, diferentes niveles donde desplazarse, juguetes que impliquen movimiento, como los discos o luces a seguir”, recomienda Sylvia Arrau, docente de Medicina Veterinaria de la Universidad del Pacífico.