Los estudiantes de Educación Superior valoraron el ingreso de la Universidad Católica al proyecto de gratuidad 2016, impulsado por el Gobierno.
Sin embargo, cuestionaron la falta de definición del Ministerio de Educación sobre los criterios de esta iniciativa y la falta de participación estudiantil.
Tras la decisición de la Universidad Católica de ingresar a la gratuidad el 2016, el rector Ignacio Sánchez aclaró, en entrevista con La Tercera, que esto no significa un respaldo a la gratuidad universal, más bien una forma de actuar y criticar “desde adentro”, el proyecto que impulsa el Gobierno.
Alrededor de un 15% de los estudiantes de esta casa de estudios, pertenecientes a los cinco primeros deciles, serían beneficiados con la medida el próximo año, es decir, cerca de 4 mil 200 estudiantes.
Daniel Gedda, presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica, la Feuc, valoró la medida, que calificó como “esperable”.
A su juicio, la institución no tenía ningún requisito que hiciera dudar de su entrada, porque sólo se medía términos financieros. Sin embargo, cuestionó el apoyo del rector Sánchez a otras modificaciones en materia laboral de los funcionarios y los avances en participación de los estudiantes.
Desde la Confech se mantienen las críticas a la glosa presupuestaria. Su vocera Marta Matamala, expresó que sigue siendo insuficiente, y reiteró que las próximas decisiones del Gobierno, sobre la reforma educacional, no pueden seguir con la indefinición que hasta ahora, no ha fijado ni los criterios ni la nómina de las instituciones de educación superior, que regirán para los estudiantes que ingresen el próximo año.
Mathías Gómez, investigador de Política Educativa de Educación 2020, manifestó su preocupación ante el posible aumento de los aranceles de los estudiantes que no recibirán gratuidad, considerando una política a mediano plazo en la reforma educacional.
Una situación que no ocurriría, al menos, durante el próximo año, según indicó.
El rector de la Universidad Católica, Ignacio Sánchez, reiteró que apoyarán económicamente la implementación de la gratuidad sólo por un año, tal como se lo han manifestado a la ministra de Educación, Adriana Delpiano, y al ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés.