Por segunda vez en el año, el Primer Juzgado de Letras de Osorno fue desalojado, tras recibir un aviso donde se alertaba de un artefacto explosivo en su interior. De esa manera se solicitó la presencia personal policial, quienes cercaron el perímetro comprendido en calle Amtahuer entre Colón y Justo Gueisse.
A pesar de la evacuación, algunos trámites se desarrollaron de igual manera, como fue el caso de un remate que se realizó en plena vía pública.
El juez encargado de la subasta, Raúl Ramírez, manifestó que ante la presencia de oferentes tomó la determinación de no suspender el remate.
Ramírez aseguró que una de las funcionarias lo alertó del aviso de bomba e indicó que el objetivo podía ser interrumpir las audiencias de mayor importancia que estaban pactadas para esta jornada.
Fue personal especializado de la SIP de Carabineros los que efectuaron la revisión de las instalaciones, no el Gope como es habitual, y al comprobarse que no había ningún elemento explosivo o sospechoso en el recinto judicial, se autorizó el ingreso de los funcionarios y asistentes al Juzgado.