Con Argentina absorbida por sus elecciones presidenciales del domingo, el juez federal estadounidense Thomas Griesa decidió el jueves sumar 15 nuevas demandas a su fallo a favor de los fondos “buitres” por deuda en default del país sudamericano.
Según la orden de Griesa, las 15 demandas de propietarios de bonos en default desde 2001 se suman a otras 36 a las que en junio pasado reconoció los mismos derechos que los fondos especulativos NML Capital y Aurelius, ganadores de una sentencia para cobrar 1.760 millones de dólares.
De acuerdo con los abogados de Argentina, las nuevas demandas de estos querellantes conocidos como “me too” (yo también) son por 6.150 millones de dólares, lo que elevaría a unos 8.000 millones el monto total a pagar por el país.
El pasado 5 de junio pasado, Griesa ya había autorizado a un grupo de 36 nuevos querellantes, algunos de ellos con sentencia firme en otros juicios, a sumarse al caso sin definir las modalidades de pago.
Un tribunal de apelaciones de Nueva York revirtió en parte esa decisión del magistrado mediante dos órdenes del 10 de agosto y 16 de septiembre, cuestionando su metodología y exigiéndole más precisiones para justificar semejante paso.
Los abogados de Argentina reiteran de su lado que una decisión de ese tipo solo complica aún más una solución del caso, aumentando de manera exponencial el monto adeudado, además de ser contraria a derecho.
Argentina reestructuró su deuda en default en dos canjes en 2005 y 2010. El 93% de sus acreedores aceptaron esas ofertas de reembolso parcial con importantes quitas, pero el 7% restante la rechazó, reclamando el reembolso de la totalidad de lo adeudado más intereses.
El gobierno argentino califica a los fondos especulativos de “buitres” por haber comprado bonos en default a precio de remate para buscar luego su cobro total mediante la vía judicial.
Nuevas audiencias
La decisión del jueves de Griesa de ampliar el número de “me too” tiene lugar antes de dos nuevas audiencias convocadas para las semanas venideras.
Una primera cita en los tribunales de Manhattan será el miércoles 28 de octubre, día en que Griesa escuchará los argumentos para resolver las modalidades de pago que corresponden a esos nuevos querellantes, sumados a la causa madre ganada por los “buitres”.
La audiencia siguiente, prevista para el 5 de noviembre, responde a un pedido de NML Capital y Aurelius para que Griesa retire los “privilegios” de la inmunidad soberana a la Argentina y avance en el denominado “discovery”, o búsqueda de bienes embargables para hacer efectiva la sentencia.
Según los fondos, Argentina y sus abogados no han entregado hasta el momento la información requerida en la causa.
Los fondos “buitres” han sufrido dos recientes fallos en contra en el tribunal de apelaciones de Nueva York, uno de ellos el 31 de agosto que revirtió una orden de Griesa para embargar activos del Banco Central argentino.
El pasado 5 de octubre, el mismo tribunal rechazó un pedido para que dinero retenido a Argentina en el Bank of New York (BoNY) en el caso por su deuda en default sea entregado a los fondos como parte de pago por la sentencia a su favor.
Griesa bloqueó en julio de 2014 un pago de 539 millones de dólares en intereses de bonos de deuda reestructurada a través del BoNY, para forzar a Argentina a cumplir con su fallo, pero si bien esa retención quedó confirmada por la instancia superior, no hay argumentos para que el dinero sea entregado a los querellantes.
Argentina celebra el domingo elecciones generales para suceder a la presidenta Cristina Kirchner, cuyo gobierno ha mantenido durante estos años una posición dura con los fondos “buitres”.
El favorito es el oficialista Daniel Scioli, quien lidera los sondeos con un apoyo cercano al 40% y unos diez puntos de ventaja sobre el opositor Mauricio Macri.
Según la ley electoral en Argentina, será consagrado vencedor quien obtenga más del 45% de los votos o al menos 40% con una diferencia de diez puntos respecto al segundo, por lo que existe la posibilidad de ir por primera vez a segunda vuelta el 22 de noviembre.