El circo de la Fórmula 1 regresa este fin de semana con el Gran Premio de Hungría marcado por la muerte del francés Jules Bianchi, la primera en la máxima categoría del automovilismo desde que falleciera el brasileño Ayrton Senna en 1994.
Bianchi murió a los 25 años después de que no lograra salir del coma en el que entró tras su accidente en el Gran Premio de Japón, en octubre.
Su entierro en Niza el martes, acompañado por muchos de los que fueron sus compañeros en sus dos temporadas en la Fórmula 1, fue una muestra del triste ambiente que se vive estos días en el paddock.
“Voy a pensar en Jules y a rezar por él, no solamente en esta prueba, durante todo lo que me resta de carrera”, señaló Hamilton en el comunicado de presentación de su equipo para el GP de Hungría.
“Sé que él desea que continuemos peleando en la pista y es lo que haremos”, prometió el doble campeón del mundo.
Además Hamilton pidió a los aficionados en la red social Twitter que le enviaran ideas para rendir homenaje al francés en su casco el domingo.
Como por azar, la diferencia de puntos entre el líder Hamilton y su compañero en Mercedes Nico Rosberg (2º) es de 17 puntos, el número de Bianchi, que la Federación Internacional del Automóvil decidió retirar de la parrilla de salida para siempre en homenaje al francés.
- Vettel aspira al triunfo -
Rosberg se refirió a la seguridad de los pilotos: “Hemos hecho grandes progresos y sé que la FIA va a continuar avanzando en este sentido”.
En lo deportivo Hamilton viaja a uno de sus trazados favoritos, en el que ha subido al lugar más alto del podio en cuatro ocasiones, la última en 2013, en el que fue su primer triunfo con Mercedes.
Intentará evitar un quinto trofeo el alemán Sebastian Vettel, que también estuvo el martes en Niza en la despedida de Bianchi.
Buscará en Hungría su segunda victoria de esta temporada al volante del Ferrari, intentando aprovechar el calor, que ya le ayudó a ganar en Malasia a finales de marzo.
Un equipo a tener en cuenta porque ha mejorado sus prestaciones en las últimas fechas es Williams, que ha subido al podio en Canadá y Austria.
En Red Bull, el australiano Daniel Ricciardo, ganador el año pasado en Hungaroring, intentará aprovechar el circuito; sinuoso y compacto, de 4,3 km., para paliar la falta de potencia de su motor Renault.
Además el español Fernando Alonso, que regresa al escenario en el que logró su primera victoria en la Fórmula 1 hace 12 años, espera dar un salto con McLaren, después de que su equipo haya introducido cambios en el motor.
Con la sustitución de la unidad de potencia, el asturiano confía en que las características del trazado húngaro le ayuden a aprovechar su coche -poca potencia pero buena aerodinámica- y alcanzar los puntos.