Lo sabroso se está imponiendo en lo sano. La obesidad en Chile ha llegado a una realidad preocupante, alcanzando cifras preocupantes a nivel latinoamericano, ubicándonos como el segundo país con el mayor índice de personas que sufren esta enfermedad. Las principales razones, una vida alejada de lo saludable y la ansiedad provocada por el estrés.
Argentina es el principal país con mayores obsesos en América Latina, un mal que representa a niños, jóvenes y adultos, una realidad muy similar en Chile, presentando el 25,1% de la población mayor de 15 años con obesidad (4 millones de chilenos), y un 39,3% tiene sobrepeso.
Según los estudio de Fundación Chile, publicados a través del documental Come Sano Chile, esta realidad muchas veces no se le da la importancia que merece, considerando que se estima que el sobrepeso y la obesidad son responsables de una pérdida anual de 234.107 años de vida, equivalente a un 6,3% del total de los Años de Vida Ajustados por Discapacidad, ubicándose en segundo lugar dentro de los factores de riesgo de muerte, seguido del consumo de alcohol.
Principales razones de la obesidad en Chile
Fundación Chile, atribuye las principales razones de obesidad en Chile, en algunas tendencias de los chilenos en cuanto a sus hábitos de vida, tales como:
- El 63% de los chilenos es totalmente sedentario.
- Tan sólo un 47% tiene horarios establecidos para las comidas diarias, un 42% declara picotear entre comidas. Un 40% de la población nacional declara consumir regularmente comida chatarra.
- La mitad de los chilenos tiene un mal dormir: la falta de un sueño reparador durante la noche contribuye en gran medida al deterioro de la salud física y mental, hoy sólo un 53% de los chilenos siente que descansó la mayoría de las noches.
Otro factor importante de considerar, según el Psicólogo, Benjamín Podletch, “es el estrés que presenta la gran parte de los chilenos, el cual producirá una consecuencia negativa, como es la ansiedad. Este factor tendrá a ser calmado mediante comida, chatarra por lo general, cigarros o alcohol”, concluyó