La Oficina de Servicios de Supervisión Interna de la ONU presentó un informe sobre casos de explotación sexual y abusos efectuados, supuestamente, por miembros de los cascos azules de las misiones de paz desplegadas en todo el mundo, puntualmente en la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en Haití (Minustah).
Debido a la participación de efectivos pertenecientes a las Fuerzas Armadas chilenas en dicha Misión de Paz, el Ministro de Defensa Nacional, José Antonio Gómez, pidió al Ministerio de Relaciones Exteriores que, a su vez, solicitara a la Misión Chilena en la ONU recopilar los antecedentes contenidos en el informe y que tengan relación a los efectivos nacionales.
Dicho organismo, de representación ante Naciones Unidas, informó que existe un solo caso de mala conducta ocurrido el día 10 de agosto de 2013, y protagonizado por Cabo 1° de la FACH Adolfo Espejo Flores, quien ofreció dinero a guardias de seguridad a cambio de favores sexuales.
La secretaría de la ONU informó el 2 de junio de 2014 a la Misión permanente de Chile en dicho organismo, que luego de una investigación realizada se determinó que el Cabo 1° Espejo queda incapacitado para formar parte de futuras Misiones de Mantenimiento de la Paz.
Actualmente, el caso se encuentra cerrado y Naciones Unidas remitió copia de la investigación y resolución a la Fuerza Aérea, Institución que aplicó el máximo de las medidas disciplinarias reglamentarias, procediendo a separarlo de sus funciones, una vez finalizada la correspondiente investigación.