El Directorio de la ANFP dispuso una querella contra quienes sean responsables de los graves incidentes provocados por barristas de Everton y Santiago Wanderers en el Estadio Sausalito de Viña, que obligaron a la suspensión de este partido por la Copa Chile.
A través de un comunicado, la Gerencia de Comunicaciones informó la medida y ratificó que el organismo ha puesto todos los antecedentes en manos de la Justicia.
“El Directorio acordó poner los antecedentes en conocimiento del Tribunal Autónomo de Disciplina para que aplique la justicia deportiva que estos casos ameritan, tal como está establecido en su Código de Penalidades, y también los hará llegar a la justicia ordinaria que deberá abocarse a castigar a aquellos que de manera tan irresponsable hayan cometido delitos”, aseguró el escrito.
“El Directorio lamenta y rechaza con dureza este tipo de situaciones que enlodan al fútbol nacional, por constituir conductas que alteran su desarrollo y que la ANFP tiene la absoluta convicción de que pueden y deben ser erradicadas de los espectáculos futbolísticos”, agregó.
El ente rector también recordó que en la Copa América el comportamiento fue distinto, aunque también era otro tipo de público. “La ocurrencia de estos hechos es particularmente lamentable considerando que hace solo unos días terminó la Copa América, que durante casi un mes transcurrió sin que sucediera nada anormal, demostrándose al mundo que el público chileno tuvo una conducta ejemplar”, dijo.
Por último, el directorio de la ANFP enfatizó su decisión de “actuar con todo el rigor contemplado en la legislación interna de la ANFP cada vez que sucedan hechos inaceptables que contribuyan a menoscabar la imagen y el prestigio del fútbol chileno”.