Caleta Lenga es uno de los destinos gastronómicos preferidos por los turistas nacionales y extranjeros que visitan la Región del Bío Bío y en general por los habitantes de la zona que disfrutan del consumo de mariscos y pescados. Pero, para quienes la visitan frecuentemente o habitan dicho sector de Hualpén, no es desconocido que en este sector habitan cientos de perros sin dueño, que merodean en busca de un poco de alimento y porque no decirlo… de cariño.
“Es difícil hacer frente a esta situación, en la oscuridad los dejan a mitad del camino a Lenga y por el olfato se guían hasta la caleta, donde tenemos restoranes”. Así lo relata Joel Chaparro, administrador del restaurant El Mono, quien asegura que este panorama se ve a diario.
Como una forma de ir en ayuda de las mascotas dejadas a su suerte, desde hace tres años un grupo de cinco personas formaron una agrupación animalista para ir en ayuda de los animalitos que viven en la caleta y en sus alrededores.
Todo comenzó cuando Tania Peréz, de origen cubano, visitó la Caleta Lenga y le llamó la atención la gran cantidad de perros abandonados que convivía en ese sector.
En ese instante pensó “no voy ir nunca más a ese lugar, hay muchos animales abandonados”.
Fue así que con el trascurrir de los días, se enteró por internet que habían personas recolectando alimento para ir en ayuda de estos canes. Así, Tania se interesó y formaron un grupo en Facebook denominado “Ayudando a los perritos de Lenga II”.
Desde esa plataforma dan a conocer campañas de esterilización, reúnen fondos y alimentos para ir una vez a la semana a compartir dando cariño y comida a quienes algún día vivieron con un humano que luego los abandonó.
En un comienzo habían 250 perros abandonados en Lenga y ya se ha logrado dar a 100 en adopción.
“Actualmente hay aproximadamente unos 150 animalitos en Caleta Lenga, los que se ubican desde la (fábrica de) Coca Cola (en 4 Esquinas) hasta la misma playa. Alrededor de 80 de ellos se concentran en las cercanías de los restoranes”, comenta Peréz.
La gran presencia de perros genera preocupación en Caleta Lenga. “El sentimiento unánime de los vecinos y locatarios en rechazo a la gente que viene a botarlos. El peligro está en que forman jaurías, de hecho recuerdo que en una oportunidad uno de ellos mordió a una niña”, indicó Joel Chaparro.
El locatario recalca que como residentes de Lenga “han planteado la situación al Municipio de Hualpén y la Seremi de Salud, pero se culpan unos a otros”, agregó.
Autoridades
Sin embargo, la entidad edilicia se defiende y aseguraron a BioBioChile que les preocupa lo que sucede ya que “desde todas partes del Gran Concepción viene gente a abandonar animalitos a la comuna”.
De hecho, para esos efectos cuentan con una ordenanza municipal que sanciona duramente a quienes sean sorprendidos abandonando perros en la comuna y particularmente en la playa de Caleta Lenga.
Así se consigna en su artículo 26, donde “se indica que sanciona con multas de 5 UTM (alrededor de 216 mil pesos) a quienes infrinjan esta normativa vigente desde el 6 de enero de 2014″.
Además, recalcan desde el municipio hualpenino, que son los únicos que cuentan con una clínica ecoveterinaria en el Sur de Chile y que se encarga de regular la tenencia responsable de mascotas.
Asimismo, destacan que desde la entrada en vigencia de la ordenanza municipal se han efectuado más de 2 mil esterilizaciones de mascotas y más de 5 mil enrolamientos a través del sistema de chip para el control de la tenencia responsable de mascotas.
De hecho, la agrupación animalista destaca que el municipio les ha apoyado en programas de esterilización y castración de mascotas.
La entidad edilicia también recalca que realiza charlas educativas en colegios, liceos y juntas de vecinos.
Mientras que desde el área de Zoonosis de la Seremi de Salud en la Región del Bío Bío, sostienen que su competencia en los perros con o sin supervisión tiene que ver con el sistema de vigilancia de rabia animal y los focos de insalubridad generado por estos animales.
Para ello, la Autoridad Sanitaria aplica medidas como sumario sanitario, sobreseimiento, amonestación y/o medidas pecunarias en contra de quienes infrinjan dicha normativa.
Soluciones
No obstante, dichas acciones tomadas por las autoridades no son suficientes para afrontar la irresponsabilidad de quienes dejan a los animales abandonados en ese sector.
El administrador del restaurante El Mono sostiene que se debe prevenir una tragedia, ya que la preocupación de la comunidad está principalmente en los niños. “La cultura de las autoridades es no actuar mientras no maten a alguien y ello se puede prevenir de manera plausible”, sentenció.
Eso sí enfatizó que la solución no pasa por sacrificar a los perros. “Son animalitos, no merecen morir, su calidad de vida es mala y para ello sería importante contar con una perrera municipal, en donde tenerlos”, añadió.
En tanto, Tania Peréz de “Ayudando a los perritos de Lenga II” afirma que se deben buscar soluciones para que no sigan dejando abandonadas a las mascotas.
“Una alternativa que tenemos es que instalen cámaras y así el municipio pueda pasar un par de multas para que se cansen de ir a botar los perritos ahí”, sostuvo.
No obstante, reconoce que eso generaría que los vayan a botar a otros lugares como la Ruta de La Madera camino a Santa Juana.
Por lo que entiende que el trasfondo del tema está en la falta de educación con la que cuenta la población. “Se debe educar a los niños y a los adultos, ya que existe falta de cultura”, señaló.