Autoridades sanitarias confirmaron este sábado el primer caso en el año de la fiebre chicunguña en Bolivia, detectado en la ciudad de Santa Cruz (este), y aseguraron que se investiga su origen para evitar contagios.
“Es un caso extraño, pues la persona afectada, una mujer de 30 años, no ha viajado a la zona endémica (Centroamérica, Colombia o Venezuela) por lo que estamos haciendo la investigación epidemiológica para ver cómo se originó y evitar un brote”, dijo Joaquín Monasterio, Director del Servicio Departamental de Salud, a la AFP.
Añadió que “hay que ver si alguna persona del entorno de la paciente (familiares o vecinos) hubiera podido traer el virus sin presentar síntomas, porque tampoco, se ha tenido ninguna referencia de otro caso”.
La paciente, asistió a un centro de salud con los síntomas propios de toda virosis (fiebre y dolores en el cuerpo). Allí se le practicaron dos pruebas que dieron positivo.
“La persona está en buen estado. Está recuperándose y esperamos que no haya trasmitido a nadie más”, anotó Monasterio en contacto telefónico.
Bolivia registró en el 2014, otros tres casos de fiebre chicunguña, también localizados en el departamento de Santa Cruz. Todos ellos con origen de Centroamérica porque el país altiplánico no tiene de manera primaria este virus.
“Fueron controlados en su totalidad y no tuvieron ninguna consecuencia”, dijo Monasterio, al subrayar que la región tropical de Santa Cruz cuenta con un eficiente control preventivo que ha permitido reducir el número de casos de dengue, transmitido por el mismo mosquito que provoca la fiebre chicunguña.