Un tribunal paquistaní dejó el jueves en libertad bajo fianza a Zaki-ur-Rehman Lajvi, acusado de ser el cabecilla de los atentados de Bombay en 2008, indicaron los abogados a la AFP.
Los ataques dejaron 166 muertos en la capital económica de India y fueron atribuidos al ilegalizado grupo paquistaní Lashkar-e-Taiba.
Las relaciones entre ambas potencias nucleares rivales se deterioraron tras esa matanza, en la que 10 hombres armados atacaron hoteles de lujo, una popular cafetería, una estación de tren y un centro judío.
Pakistán ha mantenido bajo custodia a cinco sospechosos durante más de cinco años y la falta de avances en esos juicios ha complicado las ya tensas relaciones entre ambos países vecinos.
“Presentamos una petición de libertad bajo fianza ante el tribunal antiterrorista de Islamabad el 10 de diciembre y hoy el juez” la aceptó, “tras escuchar los argumentos de ambas partes”, dijo el abogado de Lajvi, Rizwan Abbasi.
El fiscal Mohamad Chaudhry Azhar confirmó la información.
La decisión del tribunal tiene lugar al día siguiente de que el primer ministro paquistaní, Nawaf Sharif, prometiera perseguir a los grupos extremistas tras la matanza por parte de los talibanes de 148 personas en una escuela de Peshawar, en su mayoría niños.