Tribunal de Juicio Oral de Valdivia absolvió a tres de los cuatro enjuiciados por el ataque incendiario al fundo Pisu Pisué, en Rio Bueno. La machi Millaray Huichalaf, fue condenada como encubridora tras determinarse que mantenía oculto en su domicilio elementos con los que fue realizado el incendio.
Tras dos semanas y media de juicio se decidió absolver de manera unánime a Fennix Delgado Ahumada, Alex Bahamondes Garrido y al machi Tito Cañulef Neipán. En tant y por decisión dividida se decidió condenar a la machi Huichalaf.
La Segunda Sala, presidida por la magistrado Lucía Masrri, estimó que pese a la abundante prueba presentada por la Fiscalía -en donde gran parte fue aportada por la Agencia Nacional de Inteligencia (ANI)- no se logró vincular el hecho con los acusados. A pesar de esta situación, la jueza indicó que la machi mantuvo en su domicilio elementos ocultos y utilizados en el incendio del fundo Pisu Pisué el 9 de enero de 2013.
Al término del juicio, la machi Huichalaf aseguró que esta es una condena simbólica contra el movimiento de resistencia a la central hidroeléctrica en el rio Pilmaiquén.
El defensor penal público Luis Soto, tras lo resuelto cuestionó el despliegue de recursos en los 22 meses de investigación.
El fiscal Sergio Fuentes, aseguró que pese al veredicto la convicción de la Fiscalía no ha cambiado.
Por este caso eran seis personas las acusadas, tres como autores del incendio y los otros tres como encubridores. Quienes estaban calificados como los responsables del fuego en el fundo, dos no estuvieron presentes en el juicio, el argentino Facundo Jones Huala quien está prófugo y Cristián García Quintul, quien no recibió la notificación para el juicio, reagendándose su caso para el 9 de marzo.
La lectura del fallo quedó fijada para el jueves 20 de noviembre, tras lo cual el fiscal Fuentes analizará si recurre o no para anular el juicio.
Por su parte Soto, ya anunció concurrir a la Corte de Apelaciones de Valdivia o a la Corte Suprema, ya que a juicio existieron errores en la investigación.
En el tribunal hubo un fuerte control de Gendarmería, pudiendo ingresar a la sala sólo familiares, en tanto que los amigos y cercanos a los comuneros, realizaron pequeñas manifestaciones en las afueras del edificio ubicado en avenida Francia.