Despidieron al funcionario de la Muncipalidad de Tomé que diseñó el cuestionado gimnasio de Dichato. Además, se inició un sumario para indagar las eventuales responsabilidades que tendrían trabajadores de la planta en el diseño de la polémica estructura.
El gimnasio de Dichato era una obra esperada por la comunidad, para desarrollar actividades deportivas bajo techo y no tener que sufrir las inclemencias del clima. El problema lo tiene el público, que al estar sentado en la galería no puede ver la cancha en su totalidad, un error que las autoridades, ingenieros y todos quienes fiscalizaron los trabajos no advirtieron.
Ante la evidencia de los hechos, la alcaldesa de Tomé, Ivonne Rivas, decidió despedir a Alejandro Carreño, funcionario de la municipalidad que diseñó la estructura deportiva. Cabe señalar que Carreño es licenciado en Arquitectura, y le falta realizar el proyecto final que le dará el título de Arquitecto.
Además se inció un sumario para establecer si hay o no otros funcionarios de Planta responsables del bochorno. Así lo confirmó la alcaldesa.
Para el Sumario Municipal se establecieron 30 días y ya se están buscando alternativas para reparar el recinto deportivo.