Una atmósfera pesada, un trabajo atrapante y la sensación de inquietud que corroe las entrañas del espectador. Esa parece ser la tónica de la obra de Robert Morgan, cineasta que por años se mantuvo en circuitos fuera de lo comercial.
Sin embargo, la llegada de portales como YouTube y el precursor AtomFilms permitieron que el londinense, nacido en 1974, pudiera maravillar (y perturbar) al mundo entero con su filmografía enfocada al cortometraje.
El mismo cineasta prefiere señalar que sus inicios están en “El hombre en la esquina inferior izquierda de la fotografía” (1999), con la que se hizo acreedor de cinco premios y el reconocimiento de la crítica, junto con convertirse en el deleite del público especializado en Europa.
http://youtu.be/jbQ2u8b_nHo
Dicho cortometraje, de 13 minutos de duración, fue su carta de presentación al mundo tras culminar sus estudios en el Instituto Surrey de Arte y Diseño, aunque en lo formal sus primeros pasos los dio con cinco años antes en el ya olvidado formato VHS con “Paranoid”.
“Fue mi primer intento y en realidad es el proyecto con que descubrí cómo hacer una película. Las posteriores son mejores, creo”, señaló Morgan al crítico mexicano Omar Hebertt, motivo por el que confidencia que no incluye esta obra en su currículum.
http://youtu.be/6yQbm6fqMAs
Sus estudios lo acercaron al stop-motion, técnica que ha empleado para dar vida tanto al 100% de algunas de sus obras como para mezclarcla con actores reales. Un ejemplo de esto es “El gato con manos” que, según el portal Short of the Week, está inspirado en las pesadillas de su hermana.
Si bien su reconocimiento lo ha obtenido gracias a sus perturbadores relatos a través del stop motion, Morgan descarta encasillarse en una sola forma de expresar sus ideas. “Hay ciertas ideas que es mejor ejecutarlas en animación y otras que deberían ser con actores, también las hay mejor expresadas mediante una mezcla de las dos”, manifiesta.
http://youtu.be/n9MVJHN1tw0
La consolidación de su carrera llegó de la mano de “The Separation” (2003), un guiño a la obra de David Cronenberg que el mismo Morgan reconoce como una gran influencia, junto con el escritor Edgar Allan Poe. El cineasta fue galardonado por su cortometraje al año siguiente en los premios BAFTA.
http://youtu.be/ltIG3v_ySuU
Monsters estableció en 2004 la continuidad de Robert Morgan en la temática del horror con actores “de carne y hueso”, aunque con menor repercusión que el resto de sus obras.
Un largo hiato marcó su alejamiento de la dirección, volviendo a la carga en 2009 con el complejo desafío de idear y concretar un cortometraje en 48 horas. El resultado fue Over Taken.
http://youtu.be/6IEgEm8Inbc
Continuando en la brevedad, pero rompiendo sus propios márgenes, el cineasta realizó en 2011 su obra de mayor duración: Bobby Yeah. Morgan no la ha puesto a libre disposición, aunque sí se puede acceder a ella a través de la plataforma de pago de Vimeo.
En 2013, y parodiando el trabajo del stop-motion, publicó en su canal de YouTube -donde reúne casi la totalidad de su obra- el cortometraje “Invocation” que fue difundido en televisión.
http://youtu.be/TjP0g8dKsoU
Para la tranquilidad del lector, la génesis de su obra no se encuentra en algún trauma y asegura que ha elegido el terror por mera diversión: “No es como si estuviera exorcizando una tragedia terrible que me haya pasado, porque no es cierto. Tuve una niñez bastante normal y feliz”, subraya el artista, que no descarta realizar al fin un largometraje.