El goteo de palestinos muertos en Gaza continuó este miércoles a pesar de una breve tregua de cuatro horas que decretó Israel, que la aplicó tan solo en las zonas donde no tenía soldados desplegados.
La jornada se saldó con un centenar de muertos, al menos 22 de ellos mientras estaba en vigor la tregua, entre las 12H00 hasta la 16H00 GMT, según un conteo provisional.
Quince personas murieron y más de 150 resultaron heridas en un mercado al caer un obús israelí, en Shejaiya, un barrio del este de la Ciudad de Gaza, según fuentes médicas palestinas.
Previamente siete palestinos murieron en un ataque aéreo, en Jan Yunes, en el sudeste de la Franja, siempre según los servicios de urgencia.
El ejército hebreo había anunciado su tregua con una importante salvedad. “No tendrá efecto en las zonas donde los soldados están llevando a cabo operaciones”, indicaba el comunicado.
El movimiento islamista palestino Hamas la calificó de mero recurso publicitario.
“La tregua que anunció Israel es propaganda mediática y no tiene valor porque excluye las áreas inestables a lo largo de la frontera y nosotros no podremos sacar a los heridos de esas áreas”, afirmó un portavoz de Hamas en un comunicado.
Los alrededor de 1,8 millones de habitantes de Gaza están atrapados en este territorio muy pequeño, sometido a un bloqueo israelí y al cierre de su frontera con Egipto.
Según la ONU, los civiles representan más de las tres cuartas partes de los más de 1.300 palestinos muertos desde el 8 de julio, cuando el Estado de Israel lanzó su ofensiva.
- “Grave violación del derecho internacional” -
Entre las víctimas mortales del miércoles figuran por otro lado 16 refugiados del campo de Jabaliya que murieron cuando dos obuses disparados por un tanque impactaron en una escuela de la ONU, donde se habían refugiado unos 3.300 civiles.
La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (UNRWA) acusó al ejército israelí de “grave violación del derecho internacional” tras este ataque. “Es la sexta vez que una de nuestras escuelas de la UNRWA sufre un ataque”, lamentó Pierre Krähenbühl, jefe de la UNWRA.
En Tuffah, un suburbio del noreste de la ciudad de Gaza, seis palestinos, entre ellos tres niños, murieron en un ataque de tanques israelíes, indicaron los servicios de emergencia.
En Jan Yunes también murieron siete miembros de una misma familia por disparos de tanques israelíes. Poco antes, en el mismo sector, habían muerto otras tres personas y un palestino murió en Deir al Balah (centro).
Los disparos de cohetes hacia Israel desde el territorio palestino controlado por Hamas prosiguieron este miércoles sin dejar víctimas.
Israel registró desde el inicio de la ofensiva la muerte de 53 soldados y tres civiles, incluyendo a un trabajador tailandés.
En el plano diplomático, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu pidió más ayuda estadounidense para negociar un alto al fuego en Gaza, según dijo en la jornada el jefe de la diplomacia norteamericana, John Kerry.
Varios proyectos de tregua han fracasado en los últimos días, mientras ambos bandos beligerantes parecían más decididos que nunca a continuar los combates.
Israel advirtió que no abandonará Gaza, de donde se había retirado en 2005, hasta que los grupos armados palestinos hayan dejado de representar una amenaza para la población israelí.
Hamas ha advertido que rechazará todo alto el fuego mientras continúen los ataques israelíes y no se levante el bloqueo a la Franja de Gaza.
Israel decretó el sábado pasado una tregua humanitaria de 12 horas, prolongada por otras cuatro horas, pero que saltó por los aires al reanudarse los combates.
Otra breve tregua declarada el lunes por la fiesta musulmana del Eid el Fitr, que marca el fin del ramadán, también fue violada.