El presidente francés, François Hollande, anunció este viernes que ninguno de los 118 pasajeros del avión de Air Algérie que se estrelló el jueves en el este de Malí sobrevivió a la catástrofe y que se encontró una de las cajas negras del aparato.
“Lamentablemente, no hay ningún sobreviviente”, declaró el mandatario francés en una breve declaración televisada. Militares franceses enviados al lugar para asegurar la zona “recuperaron una caja negra” que está siendo “encaminada hacia Gao”, en el este de Malí, añadió.
El presidente dijo además que todas las hipótesis, y principalmente la de mal tiempo, están siendo investigadas para explicar las causas del accidente del avión de la española Swiftair, operado por Air Algérie.
La tripulación había señalado que cambiaba de ruta a raíz de condiciones meteorológicas particularmente difíciles.
Los restos del aparato, un McDonnell Douglas MD83, fueron localizados el jueves por la noche por un helicóptero del ejército burkinés en la zona de Gossi, una ciudad del norte de Malí cerca de la frontera con Burkina Faso. El avión, que se dirigía a Argel, se estrelló 50 minutos después de haber despegado de Úagadugu.
La presidencia francesa confirmó que el aparato, totalmente “desintegrado”, fue localizado y que un drone del ejército francés sobrevoló la zona del accidente el jueves por la noche.
La presidencia comunicó también que el aparato transportaba a 118 personas, y no 116 como se indicó en balances precedentes. Entre los 112 pasajeros, 51 eran franceses y 23 burkineses. El resto venían de Canadá, Líbano y Argelia.
Los seis tripulantes, dos pilotos y cuatro tripulantes de cabina, eran españoles.
Un destacamento terrestre de un centenar de soldados franceses, que partieron de la ciudad maliense de Gao a bordo de unos 30 vehículos, llegaron el viernes por la mañana al lugar de la catástrofe.
Su misión es “asegurar la zona” y recopilar elementos útiles para la investigación, así como los cuerpos de los pasajeros, explicó el ministro francés de la Defensa Jean-Yves Le Drian.
DESCARTAN DISPARO
“Descartamos desde el principio la posibilidad de un disparo desde tierra, altamente improbable, e incluso imposible”, afirmó este viernes el secretario de Estado de Transportes de Francia, Frédéric Cuvillier, recordando que “las condiciones meteorológicas se habían degradado extremadamente”.
“¿Fue esta la razón principal o hubo un problema técnico o quizá se acumularon? Eso está por determinarse”, dijo a la televisión France 2.
Por su parte, el primer ministro de Burkina Faso, Luc Adolphe Tiao, declaró que “ahora que el avión ha sido localizado, vamos a enviar al lugar a equipos para ayudar a encontrar los cuerpos de nuestros compatriotas y tomaremos todas las medidas para repatriarlos”.
La región de Gao es una zona peligrosa, donde están presentes yihadistas, bandidos y traficantes de armas, que se aprovechan de la inmensidad de esta zona, en parte desértica, difícil de controlar.
Los soldados franceses están presentes desde el inicio de la intervención francesa en Malí en 2013 para expulsar del norte del país a grupos vinculados con Al Qaida en el Maghreb Islámico (AQMI), una región que ocuparon durante nueve meses.
La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) indicó el viernes que “hará todo lo posible” por mejorar la seguridad aérea, que es la prioridad, tras una semana negra durante la cual tres aviones se han estrellado, dejando más de 460 muertos.
La víspera del accidente del avión de Swiftair, un aparato de la compañía taiwanesa TransAvia se estrelló en la isla de Penghu, a la altura de la costa occidental de Taiwán, al intentar aterrizar con muy mal tiempo. En el accidente murieron 48 de las 58 personas que iban a bordo.
Asimismo, el 17 de julio, un avión de la compañía Malaysia Airlines cayó en el este de Ucrania, tras haber sido derribado, probablemente por un misil, en un territorio controlado por los separatistas prorrusos, dejando 298 muertos.