Israel urgió este miércoles a 100.000 habitantes de la Franja de Gaza a evacuar sus casas “por su propia seguridad” e intensificó sus bombardeos tras el rechazo por el movimiento islamista Hamas de un alto el fuego propuesto por Egipto.
El ejército incrementó sus bombardeos contra el enclave palestino, en el noveno día de una operación militar cuyo objetivo es el cese del lanzamiento de cohetes contra Israel.
Tres palestinos murieron este miércoles en un ataque israelí en Jan Yunes, en el sur de la Franja de Gaza, según fuentes médicas palestinas de este territorio de 360 km2 y elevados niveles de pobreza.
Otras cinco personas resultaron heridas en el ataque, anunció el portavoz de los servicios de emergencia Ashraf al Qudra, quien precisó que un avión militar israelí había “disparado contra un coche”.
El ejército había atacado durante la madrugada las casas de cuatro responsables del Hamas, entre ellos la del ex ministro de Salud, Fathi Hammad, y del diputado Ismail Al Ashqar, en Jabalia (norte).
Los bombardeos han dejado ya 208 muertos y más de 1.500 heridos, en su gran mayoría civiles.
En la mañana del miércoles, el ejército israelí urgió a 100.000 habitantes del norte de Gaza, mediante sms, mensajes telefónicos y octavillas, a abandonar sus casas antes de las 08H00 (02H00 de Chile) “por su propia seguridad”, debido a los nuevos bombardeos más intensos.
Una advertencia similar ya había sido enviada el domingo, pero las fuerzas israelíes no llevaron a cabo sus amenazas, lo que dejó suponer que se trataba de un método de guerra psicológica.
“A pesar del alto el fuego, Hamas y otras organizaciones terroristas han seguido disparando cohetes”, según los mensajes mandados por el ejército, que asegura que “no quiere hacer daño” a los habitantes de estas ciudades.
Pero los habitantes de Gaza se preguntaban hacia dónde. “Lanzan octavillas desde sus aviones para decir a la gente que evacúe. Pero ¿donde podemos ir? Mejor quedarnos en casa y morir en nuestras casas”, exclamó Fasel Hasan, un residente del enclave palestino, con sus dos fronteras terrestres, con Israel y Egipto, estrictamente controladas.
HAMAS PIDE ACUERDO COMPLETO
Netanyahu afirmó el martes por la noche “no tener otra opción que la de ampliar e intensificar” su campaña militar, después del rechazo del Hamas de la tregua propuesta por Egipto y aceptada por Israel, que suspendió el martes sus bombardeos durante seis horas.
El Hamas, que dice haberse enterado del plan de Egipto por los medios de comunicación, rechazó cualquier tregua que no incluyera un acuerdo completo sobre el conflicto que lo enfrenta a Israel.
El movimiento islamista -considerado un movimiento terrorista por Estados Unidos, Israel y la Unión Europea- exige el cese de los bombardeos, el fin del bloqueo a Gaza, la apertura del puesto fronterizo de Rafah con Egipto y la liberación de presos palestinos. El ejército israelí anunció haber bombardeado unos 40 “objetivos terroristas”, como sitios de lanzamiento de cohetes y centros de control.
El Estado hebreo anunció la madrugada del miércoles que un millar de cohetes habían caído en su territorio en nueve días y que otros 225 fueron destruidos por el sistema de defensa “Iron Dome” (Cúpula de Acero). Cuatro fueron destruidos este miércoles por la mañana sobre Tel Aviv, la capital económica israelí.
El martes se produjo la muerte de un primer israelí, un civil de 37 años que recibió el impacto de un cohete lanzado desde Gaza, cerca del paso fronterizo de Erez.
Sin embargo las fuerzas israelíes no han lanzado una operación terrestre, aunque el ejército ha desplegado de forma ostensible tropas de infantería y tanques en las puertas de Gaza, y movilizado a 40.000 reservistas para una eventual invasión.