Brasil, el dueño de casa se quedó con el cuarto lugar del mundial. Tras la desazón de la derrota, ya que el “Scratch” iba por la final y no por la disputa de la tercera plaza, quedaba asumir como un buen perdedor el fracaso de las dos caídas que sufrieron.
Pero esto no fue así, porque los dirigidos por Scolari no se quedaron a presenciar la entrega de medallas de la selección holandesa. Un mal gesto que estaría previamente acordado por el DT de la “canarinha”, quien entró raudo a buscar a sus pupilos y los mandó directamente a los vestuarios.
Tras las dos goleadas, Brasil quedó como un mal perdedor y dueño de casa, ya que moralmente le ‘correspondía’ quedarse a ver la entrega de los premios, por su calidad de anfitrión de la cita mundialera.
Cabe señalar que Holanda se quedó con el tercer lugar del certamen tras vencer 3-0 al combinado local y mañana se disputará la final entre Argentina y Alemania por la corona del mundial de Brasil 2014.