El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, abrió el sábado la cumbre del G77+China en la ciudad boliviana de Santa Cruz con un llamado a formular una agenda de desarrollo sostenible posterior a 2015, cuando concluyan las metas de desarrollo del milenio.

“Al ser el mayor grupo de países de las Naciones Unidas, el G77 desempeña un papel fundamental para que los esfuerzos por aplicar con eficacia la agenda para el desarrollo después de 2015 sean satisfactorios”, dijo.

“El destino de miles de millones de pobres y el estado del planeta dependen del éxito de nuestra labor”, agregó.

El líder surcoreano de la ONU habló ante un auditorio compuesto por una treintena de jefes de gobierno y delegados de más de cien países que asisten a la cumbre del G77 que deliberará hasta el domingo en Santa Cruz, este de Bolivia.

Ban Ki-moon propuso “convocar a una cumbre sobre el clima para líderes de gobiernos, empresas, el sector financiero y la sociedad civil el 23 de septiembre”.

La cumbre fue organizada por el presidente pro témpore del G77, el mandatario boliviano Evo Morales, en ocasión de los 50 años del nacimiento de este bloque de 133 naciones en desarrollo iniciado en 1964 con 77 países.

A su turno, Morales dijo que el G77 busca gestar un nuevo equilibrio internacional con mayor igualdad Norte-Sur.

Y destacó que un nuevo orden mundial es esencial porque “una reducida élite de países domina los destinos del mundo, de sus economías y de sus recursos naturales”.

“Es imprescindible una nueva economía mundial con mayor justicia”, señaló.

La cita boliviana del G77 concluye el domingo con una declaración acordada anticipadamente en Nueva York por los 133 países que integran el bloque.