Tras el descubrimiento de un sitio arqueológico en la localidad de Piedra Azul, se planteó realizar un estudio del borde costero que involucre a todo el sector del seno del Reloncaví, lo que se encontraría en su primera fase de trabajo.
Hace dos semanas una empresa contratista a cargo de Saesa, realizó el hallazgo de un sitio arqueológico en los Conchales de Piedra Azul, lo que fue denunciado por un vecino.
Lo anterior motivó una serie de pericias en el lugar para determinar si los trabajos afectaron el sitio arqueológico.
La semana pasada se constituyó una mesa de trabajo entre la Gobernación Provincial de Llanquihue, Vialidad, Superintendencia de Electricidad y Combustible, Medio Ambiente, Municipio de Puerto Montt y vecinos del sector, para pedir el pronunciamiento del Consejo de Monumentos Nacionales.
En caso que se confirme la alteración a este lugar, que mantiene información ancestral de la zona, se solicitará la asesoría del organismo para seguir acciones judiciales y administrativas.
En la oportunidad, se planteó la opción de generar un catastro para efectuar un levantamiento de información en todo el borde costero, explicó Pamela Urtubia, directora del Museo de Puerto Montt.
Esta iniciativa consta de tres fases, las cuales estarán a cargo de un grupo de arqueólogos. Además, por instrucción de la Gobernación Provincial, ya se está trabajando en esta materia para obtener la documentación arqueológica en el menor tiempo posible.
La materialización de la propuesta tendrá dos partes; la primera dependerá de la recopilación de la información para que en una segunda etapa sea entregada a las comunidades para que conozcan los sitios arqueológicos que habitan.