“Juro por Dios y por esta bandera servir fielmente los deberes de mi profesión, velar por el cumplimiento de las leyes de la República, guardar y defender la vida de todos sus habitantes, rindiendo la mía, si fuese necesario, en defensa del Orden y de la Patria”. Éstas palabras marcan el inicio de la carrera de un carabinero en su juramento de servicio ante la bandera que debe rendir el 27 de abril.
Este viernes el cabo segundo José Barría Pérez, de 27 años, murió tras ser baleado durante un servicio preventivo en la comuna de Cerro Navia. Este hecho se configura como el cuarto de estas características que marca a la opinión pública en lo que va de la década.
El 2 de abril de 2012, en el sector Chequenco de Ercilla -región de La Araucanía-, el sargento segundo Hugo Albornoz perdió la vida tras recibir un disparo en el cuello durante un allanamiento a la comunidad Wente Winkul Mapu junto a un contingente del Grupo de Operaciones Especiales.
De forma póstuma, la institución ascendió a Albornoz en marzo de 2013 al grado de suboficial mayor, en una ceremonia de carácter privado.
El mismo año, en el marco de los incidentes durante la conmemoración del 11 de septiembre, el cabo Cristián Martínez Badilla de la 49ª Comisaría de Quilicura falleció luego de participar en un operativo para repeler un asalto a un local comercial. Pese a que portaba en el momento un chaleco antibalas, el ingreso del proyectil por el costado toráxico provocó su muerte.
El episodio más reciente lo marcó el deceso del subteniente Daniel Silva Albornoz, luego de enfrentarse con un grupo de delincuentes que protagonizó un asalto a una sucursal de la Caja de Compensación Los Héroes de Macul el 1 de agosto de 2013.
En dicha oportunidad el efectivo recibió un disparo en su cabeza, muriendo en el hospital institucional. Silva era sobrino del cabo primero Pablo Silva Pizarro, fallecido durante el atentado al general Augusto Pinochet en la cuesta Las Achupallas perpetrado por el Frente Patriótico Manuel Rodríquez y que terminó con otras cuatro personas muertas y once heridas.
Por ahora Carabineros se encuentra a la espera de los peritajes del Servicio Médico Legal al cuerpo de Barría Pérez para posteriormente determinar si sus funerales se realizarán en Santiago o en Chaitén, ciudad donde residen sus padres.