La guerrilla comunista de las FARC agradeció el miércoles el apoyo al proceso de paz para Colombia del presidente uruguayo José Mujica y de 254 legisladores de Estados Unidos, Gran Bretaña, Irlanda e Irlanda del Norte, e instó al gobierno de Bogotá a aceptar una tregua bilateral.
“Siempre hemos contado con el beneplácito, con la ayuda del presidente Mujica”, dijo a la prensa Ricardo Téllez, un delegado de las FARC en las negociaciones de paz de La Habana, al agradecer el llamado que hizo en Washington el martes el mandatario uruguayo -un exguerrillero tupamaro- a apoyar el proceso de paz.
“Nosotros saludamos, agradecemos, siempre el esfuerzo de Mujica. Es un hombre sabio, ponderado y seguramente sus palabras llegarán a la conciencia del pueblo colombiano”, añadió Téllez, quien también agradeció la declaración de los 245 legisladores, que junto con respaldar el proceso de paz, pidieron un cese al fuego bilateral, algo a lo que se ha opuesto el gobierno colombiano desde el inicio de los diálogos hace 18 meses.
Téllez agradeció “el resuelto apoyo al proceso de paz colombiano (…) de centenares de miembros del Congreso de los Estados Unidos, del Parlamento del Reino Unido, del Parlamento de la República de Irlanda y la Asamblea Legislativa de Irlanda del Norte, en carta fechada el 13 de mayo en las ciudades de Washington, Londres, Dublín y Belfast”.
Mujica llamó a “ayudar a las FARC y al gobierno a que encuentren una salida”, mientras que los 245 legisladores instaron a ambas partes a que “permanezcan” negociando hasta alcanzar la paz y “considerar la posibilidad de un cese del fuego y a tomar todas las medidas necesarias para recudir el costo humanitario del conflicto” armado de medio siglo.
“Estamos dispuestos al cese de fuego bilateral que piden a las partes y a tomar las medidas necesarias para reducir el costo humanitario del conflicto. Esa ha sido nuestra posición desde el inicio mismo del proceso”, declaró Téllez.
El gobierno colombiano de Juan Manuel Santos ha rechazado cualquier tregua bilateral, aduciendo que las FARC la aprovecharían para reforzarse militarmente, como supuestamente hicieron hace una década en un fallido proceso de paz.
En cambio las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), la mayor guerrilla de ese país, decretaron una tregua unilateral de 60 días al comienzo de las negociaciones de paz, el 19 de noviembre de 2012, y otra de 30 días por Navidad en 2013.
Téllez dijo que en términos prácticos “no es tan complicado” poner en vigor una tregua bilateral, pero “falta una decisión política” del gobierno de Santos.
“Nosotros tenemos esa voluntad, esto ahorraría muertes, ahorraría viudas, huérfanos, sangre de nuestro país”, expresó.
“En la cancha del gobierno está la pelota del cese al fuego, ojalá definitivo”, agregó Téllez, usando una expresión del fútbol por la proximidad del Mundial de Brasil-2014.
Ambas partes están discutiendo actualmente el espinoso tema de las drogas ilícitas, tercero de los seis puntos de la agenda, tras haber consensuado los dos primeros, reforma rural y participación política.
Los temas pendientes son abandono de las armas, víctimas y el mecanismo para refrendar un eventual acuerdo de paz.
La delegación del gobierno no formuló declaraciones a la prensa.