La sequía y el fenómeno climático de El Niño amenazan la producción de aceite de palma en el sudeste asiático y pueden en consecuencia causar un alza del precio del champú o de las galletas en los supermercados de todo el mundo.
El aceite de palma -85% de su producción viene de Indonesia y Malasia- entra en la composición de gran cantidad de productos corrientes, en particular la alimentación y los cosméticos.
Las cotizaciones empezaron a subir tras la sequía sufrida en estos dos países productores asiáticos en enero y febrero, y ello pese a que el fruto de la palma de aceite puede vivir varios meses sin agua.
Pero la Asociación indonesia de productores de aceite de palma atribuye el alza de las cotizaciones a otros factores, e indica que los efectos de la sequía solamente se sentirán más adelante este año
Ello ocurrirá “a partir de septiembre u octubre” provocando una “baja de dos dígitos en el porcentaje de la producción en Indonesia y Malasia” opina Tan Chee Tat, analista del gabinete de corretaje Philip Futures en Singapur.
“Es muy probable que las empresas repercutan el alza de los precios en los consumidores” advierte.
La Organización Meteorológica Mundial (OMM) –una agencia de la ONU– anunció en abril un “probable” episodio climático El Niño en el océano Pacífico a mediados de 2014, susceptible de afectar la producción de aceite de palma en 2015.
El Niño, que se caracteriza por temperaturas en la superficie del mar anormalmente altas en la parte centro-este del Pacífico tropical, tiene una clara incidencia en el clima de varias regiones del mundo, y tiende a hacer subir la media mundial de las temperaturas.
Bosques incendiados
Si este episodio 2014 es tan intenso como el de 1997-98, al que se imputan miles de muertos y miles de millones de dólares en daños, este Niño podría tener efectos devastadores en las plantaciones de palmas de aceite.
Fadhil Hasan, director ejecutivo de la asociación de productores indonesios recuerda que un fenómeno similar hizo subir la tonelada a 1.200 dólares (870 euros) en 2008, contra USD 930 actualmente.
Alan Lim, analista de Kenanga Investment Bank en Malasia, considera por su parte que en “el peor de los escenarios” el Niño podría afectar a un 30% de la producción en los dos países, entre seis a 12 meses después de su paso, por tanto en 2015.
Tal subida de las cotizaciones favorecería mecánicamente a los oleaginosos alternativos, en particular el aceite de soja, producido principalmente en Brasil y Estados Unidos.
Otros son menos pesimistas y aluden a las ventajosas propiedades de la palma de aceite. que da frutos dos veces por mes durante dos a tres décadas, apenas requiere de cuidados y de tierra, lo que convierte a este aceite en el menos caro del mercado.
El sector teme la creciente presión de las organizaciones ecologistas que denuncian la destrucción de antiguos bosques tropicales para extender la superficies cultivables.
“La cuestión no es el volumen de aceite de palma producido sino la forma en que es producido” explica Bustar Maitar, responsable de la campaña de Greenpeace para los bosques indonesios.
Las ONG acusan a las plantaciones de palmas de aceite y a los grupos de pasta celulosa de quemar las tierras para reducir los costes de desmonte.