Con la presencia de delegaciones de Canadá, Estados Unidos, Ecuador, Argentina, Brasil y Perú, la Gran Logia Mixta de Chile celebró sus 85 años con una concurrida ceremonia de aniversario abierta a la comunidad a la que asistieron más de 200 personas.

El gran maestro, Waldo López Belmar, saludó a los dignatarios presentes —quienes viajaron a Santiago a participar en el 8º Coloquio de la Conferencia Masónica Americana (COMAM) realizada entre el 23 y 25 de abril—, familiares, amigos e invitados que participaron junto a masones y masonas que pertenecen a esta orden que cuenta con más de 40 Logias y Triángulos, distribuidos dentro del territorio de Chile y Perú.

El gran maestro abrió su mensaje señalando que “a diferencia de muchas logias tradicionales, en este templo vosotros habéis podido observar hombres y mujeres ocupando sitiales en la oficialidad. Porque para nosotros no hay diferencia entre la mujer y el hombre que desea trabajar en su crecimiento personal”.

Así también, recalcó que “llevamos el apellido de logias progresistas, porque estamos permanentemente viendo el futuro y adaptándonos a los cambios de la sociedad, sin aferrarnos a antiguas leyes pero manteniendo los principios inalterables que nos llevarán al crecimiento personal y al de la humanidad”.

“Hoy disfrutamos de las ideas y acciones de aquellos hombres y mujeres que en el pasado nos fueron dejando su impronta. Debemos seguir su huella y abrir nuevos caminos de progreso, buscar medios de aunar inquietudes para disminuir o acabar con las desigualdades de todo tipo y, por sobre todo, esparcir las semillas de la comprensión, la tolerancia y el entendimiento entre distintas ideas y convicciones”, expuso.

En América Latina, la primera Gran Logia Mixta fue precisamente la chilena, creada en 1929 gracias a los hermanos de la logia Hiram 65 quienes, conociendo la visita a nuestro país del destacado filósofo hindú Curuppumullaje Jinarajadasa (miembro del Supremo Consejo Orden Masónica Mixta Internacional), el 25 de febrero de ese año participaron de la Consagración de la nueva Logia Mixta y, el mismo día, a las 21.30 horas, a la Ceremonia de Iniciación de los primeros postulantes entre los que estuvieron Angélica Armengolli Castro, la cual fue iniciada esa noche junto a su padre, Juan Armengolli Revello, su madre, Elcira Castro, y su esposo, Jorge López.

Según explicaron desde la organización en un comunicado, así nació la primera Logia Mixta pionera en Chile, la cual recibe el nombre de “Igualdad” concretándose a partir de ese día la sentida aspiración de los hermanos de la Gran Logia de Chile de incorporar a la mujer en los misterios de la Francmasonería.