Reiterado es el malestar entre los usuarios de los consultorios en la comuna de Puerto Montt. Aseguran que sus horas han sido aplazadas sin previo aviso por la falta de médicos en los servicios de salud y que, por exceso de pacientes, han sido derivadas al hospital base de la ciudad o derechamente enviados a sus casas.
María Elena Ruiz está inscrita en el consultorio Carmela Carvajal. Denuncia que en el servicio de atención se negaron atender a su hijo, ya que el médico de turno debía atender a 20 personas antes que ella y que, debido a este exceso de pacientes, no existían horas disponibles.
Una situación que ocurrió aproximadamente a las 21:00 horas, cuando por normativa los SAPU deben atender hasta las 24:00 horas. Ruiz subrayó que le indicaron llevar al menor, quien padece de una enfermedad crónica, al hospital base de Puerto Montt.
La mujer aseveró que la queja no sólo apunta al consultorio Carmela Carvajal, sino que es general, ya que en Angelmó se vive una situación similar, en tanto se ha comunicado con mamás que, habiendo llevado a sus hijos con tal de que sean atendidos por un médico, al no haber profesionales suficientes para la cantidad de pacientes, han debido regresar a sus casas.
Verónica Díaz Jara, usuaria del consultorio Antonio Varas y paciente crónica, sostuvo que sus horas de atención han sido reprogramadas en por lo menos dos ocasiones por falta de profesionales que la atiendan y den continuidad a su tratamiento.
En respuesta al malestar de la población, Rodrigo Alarcón, director de Salud Municipal, reconoció que existe una falta de médicos en Puerto Montt y en la generalidad de la zona sur del país, sin embargo, hoy se concentran los esfuerzos para que durante mayo se produzca una mayor incorporación de profesionales de la salud que puedan dar respuesta a las demandas de la comunidad.
La autoridad municipal indicó que Puerto Montt es una de las comunas que más refuerzo tiene en los Sapus, lo cual se presenta como una alternativa de atención para los usuarios, que muchas veces, por desconocimiento, no acuden a ellos, pero la gran debilidad, asegura, se presenta en los enfermos crónicos.