La empresa de telefonía finlandesa Nokia anunció el lunes que hará efectiva la cesión de su división de teléfonos móviles y tabletas al estadounidense Microsoft este viernes 25 de abril.
A finales de marzo, Nokia informó que esta cesión, que había anunciado en septiembre de 2013, se retrasaría.
Microsoft acordó pagar 5.440 millones de euros por las actividades de telefonía móvil (3.790 millones) y por el derecho de uso de las patentes del grupo finlandés (1.650 millones), lo que permitirá a la empresa competir con Google, Apple y Samsung.
Tras meses de negociaciones para concretar esta venta -que necesitó la aprobación del ministerio de Comercio chino, la Comisión Europea y el departamento estadounidense de Justicia-, su conclusión parece estar cerca.
Nokia fue el número uno mundial de teléfonos móviles antes de quedar relegada en 2012 por el surcoreano Samsung, un cambio que se fraguó con la aparición del iPhone de Apple en 2007.
Tras esta venta, el finlandés espera recuperar la rentabilidad y prevé concentrarse en las actividades de servicios y de fabricación de materiales para operadores de redes.
Microsoft, cuya labor principal es la de concebir programas informáticos, dispone de enormes recursos financieros para recuperar a un fabricante de teléfonos en situación delicada.