Cinco pingüinos Humboldt en cautiverio fueron degollados en un centro de rescate de esta especie en peligro de extinción localizado en Puerto Eten, en la costa norte de Perú, informó el martes la fiscalía.
Los restos de los pingüinos, dos adultos y tres crías, aparecieron esparcidos alrededor de dos pozas de agua que les servían de hábitat en una escena que asemejaba a una película de terror.
“Presentan cortes de 6 por 4 centímetros aproximadamente y con el cuello expuesto. También hay sangre en diferentes partes de la poza 1″, dijo a periodistas la fiscal Karen Padilla, quien investiga el caso.
Los pingüinos adultos tenían entre nueve y ocho años de edad, en tanto que la edad de los crías fluctuaba entre dos años y ocho meses, según la fiscalía.
La matanza de los pingüinos redujo a 16 la cantidad que sobreviven en el centro de rescate y reproducción que administra un grupo civil llamado “Asociación tu tierra”.
El extraño caso movilizó a la policía y a las autoridades ambientales de la fauna silvestre, y despertó el interés de la prensa conmocionada por el hecho.
El pingüino de Humboldt (Spheniscus humboldti) es una especie de ave no voladora, que mide entre 50 y 70 centímetros de longitud y que anida en el océano Pacífico a lo largo de la costa de Chile y Perú.
La especie debe su nombre a la corriente de Humboldt, una masa de agua fría que descubrió el científico alemán Alexander von Humboldt que cada cierto tiempo recibe una inyección de agua cálida conocida como el fenómeno del Niño.
En Perú estos pingüinos se encuentran principamente en islotes del Callao, frente a Lima, y en la islas Ballestas, en Paracas (costa sur).
Los pingüinos de Humboldt no superan los 50.000 ejemplares en Chile y Perú.
El fenómeno climático El Niño y la acción de pescadores, en cuya redes de enredan cientos de pingüinos cada año, son las principales amenazas de la especie.