Globos aerostáticos, aviones no tripulados, láser… Los gigantes del sector tecnológico compiten en imaginación para tratar de llevar Internet a las zonas más remotas del planeta.
Google acaba de comprar Titan Aerospace, una compañía estadounidense con una veintena de empleados que desarrollaron prototipos de drones solares capaces de mantener la altitud durante cinco años, al modo de los satélites.
“Los satélites atmosféricos podrían ayudar a proporcionar acceso a Internet a millones de personas”, dijo un portavoz de Google consultado sobre las razones de esta adquisición.
La idea de transformar aparatos voladores en repetidoras de Internet en áreas remotas no es totalmente nueva para Google. La firma ya tiene un proyecto de este tipo, llamado “Loon”, con globos aerostáticos.
Según el sitio web dedicado a “Loon”, se trataría de crear “una red de globos” en la estratosfera, ubicada por encima de la franja de los vuelos de aerolíneas comerciales y de los problemas meteorológicos. Los globos serían utilizados como repetidoras entre la red mundial de Internet y las infraestructuras equipadas con una antena específica.
Las pruebas comenzaron en junio de 2013 en Nueva Zelanda, y uno de los globos terminó a principios de abril una vuelta al mundo que le llevó 22 días.
Google espera tener globos suficientemente resistentes para volar durante 100 días, con desplazamientos generados por algoritmos informáticos. “Los globos presentan algunos problemas científicos realmente difíciles”, reconoce sin embargo el sitio.
El análisis parece ser compartido por Facebook, que participa con otras empresas de tecnología como Samsung, Nokia, Ericsson y Qualcomm en la iniciativa “internet.org”, que apunta a mejorar el acceso a Internet en las zonas menos desarrolladas.
Facebook creó a finales de marzo un equipo especial, el “Conectivity Lab”, que reúne sobre todo a expertos de la NASA y los cinco trabajadores del fabricante británico de aviones solares Ascenta.
Muy experimental
En un documento que hace un balance sobre las investigaciones que se llevan a cabo para “conectar el mundo desde el cielo”, el presidente ejecutivo de Facebook, Mark Zuckerberg, mencionó los drones como “una de las principales áreas” de investigación.
“Los drones tienen más resistencia que los globos aerostáticos y se puede controlar con mayor precisión su ubicación. Y a diferencia de los satélites, los drones no se queman en la atmósfera cuando su misión ha acabado. En lugar de eso, pueden fácilmente volver a la Tierra para recibir mantenimiento y ser nuevamente desplegados”, explicó.
Otro método propuesto: el láser para conectar satélites u otros aparatos voladores. Tiene la ventaja de acelerar la velocidad de conexión, pero orientar sus rayos ópticos equivale a “esperar ver la Estatua de la Libertad desde California”, señaló Zuckerberg.
¿Pueden estas originales ideas realmente materializarse? Los expertos se muestran escépticos.
“Todo esto es muy interesante, pero la tecnología no ha sido probada todavía”, indicó a la AFP Roger Kay, analista de Endpoint Technologies.
“La gente ha manejado esto durante años y no se ha llegado a ninguna parte”, coincidió Jack Gold, presidente de la firma de investigación J. Gold Associates.
“No creo que sea rentable para empresas como Google o cualquier otra mantener instalados miles de drones sólo para dar a la gente acceso” a Internet, añadió.
Estima que Google “tiene los medios” para “hacer todo tipo de experimentos”, pero probablemente eso no sea “una manera seria para ellos de suministrar Internet”.
En términos de conexión a Internet, Google tiene también otro proyecto, menos soñador, de una red de ultra alta velocidad en fibra óptica en algunas ciudades de Estados Unidos. Y de acuerdo con una fuente cercana al asunto, los equipos de Titan deberían cooperar con proyectos como Loon, pero también con otras personas que trabajan en proyectos mucho más concretos, como el servicio de cartografía Google Maps.
Roger Kay apunta a que se trate de una “acción defensiva” frente a Facebook, o incluso a algún otro actor de internet, Amazon, cuyo presidente, Jeff Bezos, habló hace un par de meses de un proyecto de usar drones para hacer envíos.
Google “no quiere estar en desventaja en caso de que resultara un buen nicho”, dice el analista, “pero también es posible que eso nunca dé frutos”.