La diputada del Partido Comunista (PC) Camila Vallejo y los independientes Gabriel Boric y Giorgio Jackson, asistieron la tarde de este jueves hasta la sede Bellavista de la Universidad Andrés Bello (UNAB), a conversar y apoyar a los estudiantes de la escuela de Derecho quienes desde el miércoles iniciaron un paro de actividades.

Acusando falta de infraestructura, hacinamiento y lucro, los estudiantes realizaron un plebiscito el miércoles, en el que se tomó la decisión, con más de un 80% de apoyo, de paralizar sus actividades para exigir los cambios necesarios a Laureate Inc., grupo económico internacional que controla las decisiones financieras de la casa de estudios.

Al respecto, el presidente del centro de alumnos de la carrera de Derecho, Sebastián Muñoz, luego de un diálogo entre los alumnos y los parlamentarios conocidos como la “bancada estudiantil”, manifestó que “nosotros como estudiantes no estamos viendo la reinversión que se hace dentro de la facultad”.

“Nosotros somos una de las universidades más grandes dentro del país con 42 mil alumnos y pagamos de arancel 4 millones de pesos, más 400 mil pesos más para efectos de matrícula. Nosotros no contamos con la trasparencia en que se están ocupando esos fondos hoy”, apuntó el dirigente estudiantil de la UNAB.

“Precisamente están (el grupo económico controlador) siendo investigado por el Servicio de Impuestos Internos (SII), por este mismo motivo. Por eso consideramos que es de real importancia que en este minuto tengamos mucha más fuerza de la que estamos teniendo”, agregó Muñoz quien llamó a que otras facultades apoyen la movilización.

En tanto, el diputado Jackson, ex presidente de la FEUC, manifestó que “nosotros venimos a respaldar a una iniciativa y organización estudiantil, sobre todo porque es tan difícil en el sector privado. Muchos de los problemas que están viviendo acá las y los estudiantes de la UNAB acá en Derecho y de otras facultades que se están sumando, son cosas que se han dicho, de los efectos perversos que tiene el lucro en la educación. Cuando la educación se entiende como un negocio pasan cosas como estas. No es casualidad que estén viviendo los problemas que se repiten en otras universidades y que se anticiparon dentro de las discusiones del movimiento estudiantil (2011)”.

“Llamamos a la conciencia de las autoridades de gobierno, de todos los otros parlamentarios, y por supuesto, a que los controladores que en este caso tranzan acciones en la bolsa de Estados Unidos, que en Chile se les va a acabar el negocio. Así que vayan contando los días del negocio, porque acá vamos a terminar con el lucro en la educación. Queremos que acá las familias los estudiantes puedan vivir con sus expectativas y no que sean manipulados por juntas directivas que finalmente lo que hacen es especular a cuál va a ser el mercado laboral, con cuales van a ser las carreras que van a tener que abrir para maximizar sus utilidades”, agregó tajante Giorgio Jackson.

Por su parte, Camila Vallejo al ser consultada si consideraba una sorpresa que esta movilización se efectúe en una institución privada, sostuvo que “esto es demostrativo de la crisis que lleva la educación superior, y sobre todo del mundo privado, porque aquí se refleja no solamente que hay lucro y que hay falta de transparencia en la utilización de recursos, sino que también falta democratizar los espacios en instituciones de educación superior. Hay muchas instituciones privadas que cuando sus estudiantes se organizan para exigir derechos, trasparencia y participación, se les expulsa y persigue políticamente”.

“Centremos el debate en lo que es el lucro y como combatirlo, porque además es ilegal, y también en la necesaria democratización de los espacios universitarios, porque efectivamente la democracia interna permite mayores grados de fiscalización respecto, entre otras cosas, a la utilización de los recursos”, precisó la diputada.

Finalmente, Gabriel Boric manifestó que “lo dijimos en los últimos años, el caso terrible de la Universidad del Mar era la punta del iceberg de un problema mucho mayor, que es que en este país todavía hay algunos políticos y empresarios que creen que la educación es un espacio para hacer negocio. Y acá las y los compañeros de la UNAB lo tienen muy claro. Ahí dice (indicando una pancarta), ‘contra la educación empresarial’. Por lo tanto nosotros hoy día desde nuestro rol como diputados vamos a trabajar para que esto no siga sucediendo y siempre con la vista puesta en los estudiantes y en sus familias, porque la irresponsabilidad que ha tenido el Estado para permitir que esto se perpetúe durante los últimos años en Chile, no puede ser gratuita. Acá se tiene que hacer cargo”.

Finalmente, el diputado magallánico indicó respecto del ambiente existente el Congreso que “creo que hoy día hay un consenso social que la educación no puede seguir siendo un negocio y eso va a facilitar el trabajo en el parlamento también”.