El Centro de Conservación Cetácea y Ecoceanos celebraron la decisión de la Corte Internacional de Justicia de La Haya de ordenar a Japón revocar todos los permisos de caza científica de ballenas que este país mantenía en vigencia y que eran criticados por países y organizaciones ciudadanas de América Latina y el mundo.

Para la directora ejecutiva del Centro de Conservación Cetácea de Chile, Elsa Cabrera, la decisión del tribunal “es el resultado de años de trabajo de diversos países y organizaciones civiles que jamás han cedido ante las crecientes presiones al interior de la CBI para legitimar operaciones balleneras que violan la moratoria y el santuario de ballenas del Océano Austral. Hoy la Corte nos ha dado la razón”.

Sin embargo, la dirigente advirtió que la mala fe con que actúa Japón al interior de la CBI no se limita a la caza “científica” de ballenas.

Por su parte el director ejecutivo del Centro Ecoceanos, Juan Carlos Cárdenas afirmó que “ésta es una gran victoria para nuestros océanos y los ciudadanos del planeta, especialmente los latinoamericanos y del Caribe quienes llevaron una campaña de apoyo a la demanda de Australia contra las operaciones de caza del gobierno japonés en aguas antárticas”.

“La decisión inapelable de la CIJ genera un antes y un después en la Comisión Ballenera Internacional (CBI), al propinar un duro golpe a los intentos de diversos países de eliminar la actual moratoria global a la caza comercial de ballenas. Esta decisión fortalece el papel del bloque de Estados de Latinoamérica & El Caribe,- agrupados en el Grupo de Buenos Aires (GBA)-, y su trabajo conjunto con las organizaciones de la sociedad civil en la CBI”.

La demanda se inició en mayo de 2010 cuando el gobierno de Australia presentó una demanda contra Japón ante la Corte Internacional de Justicia por la matanza de ballenas en el Océano Austral con supuestos fines de investigación científica.