Pensar que no hay que preocuparse por los dientes de leche, es un error.
Según el subdirector Dental de Vidaintegra, Eduardo Betancour, es importante cuidar los dientes de los niños desde que son bebés. “Alrededor de los 6 meses de edad, ya es recomendable consultar a su odontólogo, por cuanto será él quien verifique la normalidad de las estructuras y entregue recomendaciones preventivas para el cuidado de su salud bucal”, explicó.
En este sentido, el especialista también explica que es fundamental limpiarle bien la dentadura a los pequeños. Él aclara que lo ideal es que una vez que el niño pueda sostener el cepillo, un adulto lo acompañe y lo guíe.
“Aquí lo importante es la remoción física de la placa bacteriana, a través de un cepillo pequeño y suave, de las caras que mastican en dientes y muelas; es fundamental que los padres y niños sepan que la limpieza física a través del cepillo y la seda dental es lo más importante”, expresó.
Pese a que los niños pequeños no tienen la destreza suficiente para controlar su placa bacteriana, es fundamental crearle el hábito de cepillarse al menos 3 veces al día. “Esto se logra entregándole el cepillo después de cada comida para que imite a un adulto y posteriormente, sea este último quien realice un repaso sobre el cepillado del niño, para sí, eliminar efectivamente la placa bacteriana”, explicó el especialista.
La destreza suficiente se logra alrededor de los 8 años, donde recién se le podría encargar la responsabilidad de cepillarse solo, sin embargo, siempre es bueno que un adulto verifique si lo está haciendo bien.
Malformaciones dentales
Si bien el correcto uso del cepillo y la seda dental es fundamental, existen ciertas complicaciones que escapan de las enseñanzas que los padres puedan darle a sus hijos.
Por ejemplo, hay casos en que a los niños no les salen los dientes definitivos y deben quedarse con los de leche.
“Desafortunadamente, existen enfermedades que complican la formación de los dientes, muchas de ellas están relacionadas con la adecuada nutrición del niño, ya sea en su vida intrauterina como después del nacimiento, o también existen casos en que a causa de algunas enfermedades infecciosas, el uso de antibióticos interfiere la normal formación de los dientes, dejando huellas en su estructura” afirma Betancour.
Los dientes de leche se empiezan a caer a los 5 o 6 años, y el proceso dura hasta los 10 u 11. A partir de los 6 años comienza a aparecer la segunda dentición y es recomendable adoptar nuevos hábitos de higiene bucodental. Si lo dientes demoran más de lo normal en aparecer, es primordial realizar las consultas y exámenes pertinentes con el dentista.
Betancourt añadió que para mantener una buena salud dental en los niños es fundamental:
- Mantener una adecuada alimentación
- Tener una buena higiene bucal diaria a través del cepillado y uso de la seda dental
- Visitar periódicamente al odontólogo.