Durante el miércoles recién pasado, la Pontificia Universidad Católica de Chile albergó un debate sobre la crisis política en Venezuela.
A la actividad asistieron dos expositores, uno de ellos el vocero en Chile de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), el académico José Noguera, quien representaba el sector opositor al gobierno.
En tanto, la voz oficialista la puso el senador del MAS, Alejandro Navarro, conocido por su simpatía a la administración del fallecido Hugo Chávez y la del hoy presidente, Nicolás Maduro.
Al término del foro y de manera sorpresiva, una asistente al espacio comenzó a encarar al senador Navarro, por la defensa férrea que realizaba éste al gobierno venezolano y su “libertad de prensa” que existiría en ese país.
Fue eso último lo que motivó a la persona, una venezolana que se identificó como periodista, a increpar al parlamentario, quien no tuvo más que escuchar sus palabras.
Según detalló, ella como periodista está en una “lista negra” para ejercer su profesión en el gobierno. Situación similar con una amiga, quien se encuentra amenazada.
“Tengo una amiga periodista que en este momento está amenazada ella y su hija. ¿Por qué? Porque le dijeron que si ella escribía algo en contra del gobierno, bueno, qué iba a pasar. Y no me venga a decir eso (de libertad de prensa) porque yo estuve viviendo al interior del país”.
La extranjera aseguró que diariamete hay un clima de inseguridad, citando el caso de su madre que “todas las noches escuchan balaceras y bombas lacrimógenas”.
Ante ello, Navarro le respondió que en Chile ocurre lo mismo en la población La Legua.
Otro dato que entregó fue que Chávez no habría hecho nada de lo que se expuso, como por ejemplo “la educación gratuita y la salud pública”.
“Toda la vida ha existido. Chávez no ha hecho nada diferente a lo de los gobiernos anteriores. Y a mi usted no me va a venir a decir, porque yo tengo mucho más de 30 años viviendo en ese país, y cómo son las cosas. Y yo quisiera que usted no estuviera aquí. Váyase a vivir a Venezuela, se lo regalo, le dejo mi casa, porque ni siquiera se puede beber”, concluyó, ante los aplausos de los asistentes.
Puedes ver la intervención desde el minuto 46.