El werkén de la comunidad Pepiukelén de Pargua, Francisco Vera, emplazó al Gobierno a responder quiénes están tras las rejas cuando matan a un mapuche, en respuesta a los 10 años de prisión que recibió el machi Celestino Córdova.
El vocero de las comunidades mapuche-huilliche mostró su disconformidad por la condena al machi Córdova, ya que asegura que el Estado chileno no mide con la misma vara cuando se trata de crímenes en contra de comuneros.
Sin embargo, acusó que sin pruebas concluyentes, a su juicio, se le sentenció a 18 años de prisión a Córdova, un castigo que considera injusto.
Si bien Vera Millaquén lamentó la muerte del matrimonio Luchsinger-Mackay, fue enfático en acusar al Gobierno junto al Ministerio de Público de realizar montajes para inculpar a comuneros o figuras religiosas, como es el caso del machi, en crímenes y hablar de acciones terroristas, cuando los mismos organismos de Derechos Humanos insisten en no calificarlos como tal.
El werkén recordó a Alex Lemún, Matías Catrileo, Jaime Mendoza Collío, entre otros, los que no tuvieron el mismo trato judicial cuando se trató de enjuiciar a quienes les dieron muerte.
Para Vera, el conflicto de La Araucanía, se resolvería con la aplicación efectiva de la ley sumado al respeto total de los tratados internacionales, como el convenio 169 de la OIT, que protegen a las comunidades.
De la misma manera, observa con cierto temor que surja un estallido de violencia en los grupos armados en la zona roja del conflicto mapuche, sin que tengan que ser comuneros los reales generadores de actos violentos por lo que teme existan represalias por parte del Gobierno con el fin de justificar una denostación y escaso reconocimiento hacia las comunidades indígenas del país.