Comunidades mapuche huilliche del río Pilmaiquén afirman que se resistirán ante la inminente construcción de la Central Hidroeléctrica Osorno, que fue aprobada recientemente por la Dirección General de Aguas.
De acuerdo a Rubén Cañio, vocero de las comunidades en resistencia del río Pilmaiquén, las instancias legales y públicas se acabaron tras la resolución de la DGA, calificando la situación como un duro golpe al pueblo mapuche, que cuestiona nuevamente la relación que el Estado Chileno dice buscar con el pueblo originario, el cual de concretarse la construcción de la central verá cómo el centro ceremonial Kintuante, de amplia importancia espiritual en el sector, quedará bajo el agua.
Por lo mismo es que tras reunirse con representantes de comunidades y organizaciones indígenas en Río Bueno, se tomó la firme determinación de impedir que el proyecto que concrete, para lo cual aseguró que ya comienzan a organizarse.
Cañio enfatizó en que el problema no lo han generado las comunidades indígenas, sino que el propio Estado chileno y la empresa hidroeléctrica, a la cual calificó como invasora.
La autorización efectuada por la Dirección General de Agua permite la construcción de una boca toma en el río Pilmaiquén, para el establecimiento de un embalse que inundará amplia cantidad de hectáreas en el sector, por sobre los 70 metros de altura, para el establecimiento de una central hidroeléctrica de busca entregar 54,3 MW energía al Sistema Interconectado Central y 343 GW al año.
La resolución de la DGA vino a terminar con seis años de tramitación del proyecto hidroeléctrico por parte de la empresa Pilmaiquén S.A. , tiempo en el que parte de las comunidades indígenas del sector han mantenido una seria oposición, con incluso personas procesadas actualmente por la justicia, pues aseguran que el daño cultural y espiritual al pueblo mapuche Huilliche será enorme, ya que la iniciativa energética dejará bajo el agua un sitio ceremonial que ha sido declarado incluso por la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena (Conadi) como un lugar que necesita ser protegido.