Las carreras de Ingeniería Acuícula, Ingeniería Forestal y Agronomía, han tenido un descenso del 30% en sus matrículas desde el año 2009, según reveló estadística del Consejo Nacional de Educación (CNE).
En el caso de la profesión pesquera, la crisis provocada por el virus ISA en los salmones y la baja empleabilidad actual en el sector, tendría una alta relación con el fenómeno. No así para el caso de los estudios del bosque, donde las instituciones superiores estarían desinformando a los jóvenes.
“Es paradójico que, estando en una época en que las temáticas ambientales y de recursos naturales gozan de mucha importancia, esto no se vea reflejado en que más jóvenes quieran estudiar esta carrera”, observó el presidente del Colegio del Colegio de Ingenieros Forestales, Jorge Goffard.
Goffard comentó que muchos postulantes se encuentran desorientados ante la salida de nuevos programas con distinto nombre, pero contenido similar.
Lo anterior fue reafirmado por el presidente del Colegio de Ingenieros, Fernando Agüero, quien criticó carreras que supuestamente serían ingenierías, pero que cuentan con tiempos de egreso y sueldo menor al promedio, aseguró a El Mercurio.
Agüero aprovechó de advertir un hecho que ocurre en el sector, donde las carreras de seguridad laboral se encuentran en un explosivo aumento, junto a la minería.
“Si se mantienen los ingresos de 2013, en que las matrículas superaron los 71 mil estudiantes para Ingeniería en Prevención de Riesgos, este mercado se podría saturar en los próximos cinco años, especialmente para carreras técnicas”, estimó.