Antes del mes de julio espera cerrar el ministro Carlos Aldana los 29 sumarios por violación de derechos humanos que dirige desde el año 2005. Entre los casos emblemáticos que investiga están la desaparición y homicidios de campesinos de Mulchén, de trabajadores de EFE y la papelera de Laja, en el sector de San Rosendo, así como el asesinato de miristas en la operación Alfa Carbón 1.
A casi nueve años de haber iniciado su trabajo, el ministro en visita de la Corte de Apelaciones de Concepción, Carlos Aldana, se acerca al fin de la compleja labor encomendada por la Corte Suprema.
Tras dictar una serie de condenas por secuestros y crímenes en las comunas de Santa Bárbara y Tomé, por ejemplo, el magistrado tiene hoy pendientes casi 30 causas, cuyas investigaciones -dijo- espera concluir en los próximos seis meses.
Antes del cierre de los procesos, el ministro en visita espera encausar a sospechosos y acusar los ya procesados, antes del próximo paso, el que Aldana deja para el segundo semestre, cuando podría terminar con los casos por las violaciones de derechos humanos durante la dictadura.
Importantes resoluciones se esperan para los próximos días en los casos Mulchén, por la desaparición de 18 campesinos, y también en la causa por las ejecuciones de 18 trabajadores de Ferrocarriles y de la papelera, crímenes todos perpetrados por personal de Carabineros y del Ejército en 1973 en los días posteriores al golpe de Estado.