Tras su polémico paso por Valparaíso, la delegación de expertos del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (Icomos), enviada por la Unesco, inspecciona esta semana el estado de las 16 iglesias de Chiloé, declaradas patrimonio mundial.
Entre los objetivos de la visita, destaca la revisión de las medidas que se estarían adoptando para mitigar el impacto visual de la construcción del Mall Paseo Chiloé, obra cuestionada por su irrupción en el tradicional paisaje de la isla y por situarse cerca de la Iglesia de San Francisco.
La arquitecta brasileña y experta de Icomos, Betina Adams, junto a César Moreno-Triana, encargado para Latinoamérica y el Caribe del Centro de Patrimonio Mundial, son los encargados de recoger la información sobre las características del contexto de las iglesias en relación con su Valor Universal Excepcional; las zonas de amortiguación; las medidas para proteger su entorno; y la revisión de las actuales disposiciones de protección y administración, entre otras tareas.
Cristian Larrere, director ejecutivo de la Fundación “Amigos de las Iglesias de Chiloé”, señaló a BioBioChile que con esta visita no esperan que cambie algo que ya permitió el Estado chileno, al dar luz verde al centro comercial. Sin embargo, confían en que se adopten las medidas para que no se vuelva a afectar de esta manera el patrimonio que existe en otro lugares del país.
La visita al sector del Mall y la Iglesia de San Francisco se realizará este jueves, en compañía de representantes locales.
El informe final de esta misión será presentado en la 38º sesión del Comité de Patrimonio Mundial, a realizarse en Qatar el 2014, y en la ocasión se espera entreguen recomendaciones sobre medidas para mitigar el impacto visual del cuestionado centro comercial.