Los senadores reaccionaron en contra a la idea planteada por el Congreso de Haití donde se solicita intervención de las tropas de Paz de Naciones Unidas, en la crisis civil que afecta al país.
El jueves pasado el presidente del Senado, Jorge Pizarro, recibió una carta de su par de Haití, Simon Dieuseul Desras, en la que le solicita intervenir en el conflicto institucional que vive ese país y “defender al pueblo haitiano sediento de democracia contra los excesos de un poder arbitrario y totalitario”, en alusión al actual gobierno liderado por Michel Martelly.
Una carta “preocupante”, con un llamado “dramático”, donde se plantea el riesgo inminente de conflicto y enfrentamiento entre las fuerzas políticas y civiles de Haití, según Jorge Pizarro.
El senador indicó que las fuerzas de paz de Naciones Unidas no pueden involucrarse en un conflicto interno.
Por lo mismo, manifestó que ya tomó contacto con el Parlamento Latinoamericano para coordinar una misión que evalúe la situación social en ese país.
Asimismo, convocó a una sesión especial de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado para el próximo martes, donde ha sido citado el canciller Rafael Moreno.
En la misma línea se mostró el ministro de Interior, Andrés Chadwick, quien recordó que las tropas chilenas en Haití son para garantizar seguridad y no para intervenciones políticas.
El senador UDI y miembro de la Comisión de Relaciones Exteriores, Hernán Larraín, planteó la evidencia que deja la misiva, respecto a que las tropas no han logrado objetivos claves en la institucionalización después de 10 años de trabajo en la zona.
Además, insistió en la necesidad de avanzar en que la presencia de Chile debe ser de carácter civil y no militar, esto para apoyar el desarrollo socioeconómico e institucional de Haití.