La Agencia Nacional de Seguridad (NSA) estadounidense almacenó datos electrónicos personales de ciudadanos británicos con el permiso de Londres, según documentos filtrados por Edward Snowden y publicados el jueves por medios británicos.
Las autoridades británicas dieron su acuerdo en 2007 para que los datos de teléfonos, de internet y correos electrónicos de sus ciudadanos pudieran ser retenidos y analizados por la NSA, algo que no permitía hasta entonces, afirman el diario The Guardian y la cadena de televisión Channel 4.
Se trata de las nuevas revelaciones de los documentos de Snowden, antiguo miembro de la NSA, sobre el espionaje de su agencia a países amigos, desde sus gobernantes hasta sus ciudadanos.
The Guardian y Channel 4 citan un documento de mayo de 2007 dando cuenta del cambio de política que abría la puerta al almacenamiento de todos los rastros electrónicos de los británicos.
El documento hablaba de una “nueva política que amplía el uso de datos británicos puros incidentalmente reunidos para análisis” de inteligencia.
Y detalla de dónde pueden venir esos datos: “IP (protocolo de internet) y direcciones de correo electrónico, números de fax y de celulares”.
El acuerdo se hizo pese a que cinco países angloparlantes -Estados Unidos, Gran Bretaña, Australia, Canadá y Nueva Zelanda- se habían supuestamente comprometido a no espiarse entre ellos.
Las autoridades británicas no reaccionaron de momento al artículo.