Hacer ejercicio con regularidad posee múltiples beneficios, a los que ahora se agregan una mejoría no sólo en la condición física, sino también en la función cerebral, reduciendo incluso las consecuencias biológicas y cognitivas del envejecimiento.
Según un nuevo estudio realizado por la Universidad de Texas y publicado por Frontiers in Aging Neuroscience, realizar actividad física aeróbica podría ayudar a los adultos mayores a mejorar su memoria y su salud cognitiva en la medida que envejecen.
La investigación tomó como referencia un grupo de 37 adultos mayores -de entre 57 a 75 años- con estilos de vida sedentarios, quienes fueron divididos en dos grupos. Los primeros realizaron ejercicio aeróbico supervisado en una bicicleta estática o cinta de correr durante una hora, tres veces a la semana durante 12 semanas.
Los participantes fueron evaluados antes, durante y posteriormente a la actividad, vislumbrándose una mejora en su memoria y un aumento en el flujo sanguíneo cerebral en el hipocampo, la región afectada por la enfermedad de Alzheimer.
“Esta investigación muestra el gran beneficio del ejercicio aeróbico en la memoria y demuestra que el ejercicio aeróbico puede reducir las consecuencias biológicas y cognitivas del envejecimiento”, aseguró Sandra Chapman Bono, principal investigadora.
Según The HuffingtonPost, los hallazgos también demuestran que este tipo de ejercicio en personas de la tercera edad también ayudan a reducir la presión arterial, regular los niveles de insulina e incluso reducir los “sofocos”.