En el marco del caso por presuntos abusos sexuales al interior del colegio Apoquindo, un perito aportado por la defensa de los imputados cuestionó el escaso tiempo que habría empleado el Servicio Médico Legal para examinar a uno de los menores denunciantes.
El perito Luis Ravanal fundamentó los motivos por los que desacreditó las pruebas entregadas por el Ministerio Público en el caso del juicio oral que se sigue por los cinco menores que habrían sufrido abusos sexuales por parte de los auxiliares Esteban Moya y Margarita Villegas.
Al respecto, sostuvo que el SML solo empleó cinco minutos para realizar el examen sexológico a uno de los niños, en circunstancias que la indagatoria debe extenderse por lo menos entre 20 y 30 minutos. Ésta incluye una entrevista, examen físico y toma de evidencias (fotografías), por lo que, a su juicio, es prácticamente imposible desarrollar la pericia en el tiempo que denuncia.
Junto a ello, en el Cuarto Tribunal Oral de Santiago se cuestionaron por parte de la defensa los resultados de las interpretaciones del Servicio Médico Legal sobre las fotografías tomadas a los menores.